La capital reúne a los mejores salseros
Ritmo, sabor, movimiento de hombros y de caderas y cuerpos que se entrelazan. El I Simposio Internacional de Salsa, un acontecimiento en el que se han dado cita los mejores bailarines e instructores de este ritmo, ha convertido a Madrid en la capital mundial de la salsa. Desde simples aficionados hasta auténticos apasionados han llegado desde distintos lugares de España y el resto de Europa para aprender unos, y mostrar los otros, las últimas tendencias de este pegajoso baile.
'Me enganché casi sin darme cuenta. Conocí la salsa por una antigua novia y me gustó mucho. Soy abogado y este ritmo es una verdadera válvula de escape. Es un ambiente muy sano al que cada vez acude más gente', cuenta Eugenio Pedreño, un aficionado que desde el pasado jueves se halla en Madrid, procedente de Murcia para participar en el simposio.
Eugenio vino acompañado de un grupo de 15 personas, amantes como él de la salsa que no querían perderse la ocasión de apreciar en vivo y en directo a los más reconocidos maestros internacionales de esta música latina. Pero no sólo de Murcia han venido salseros. Barcelona, Cádiz, Zaragoza y otros puntos de España han contado con una nutrida representación de apasionados y fervientes admiradores de la música que más se baila en América Latina y que cada día cobra más adeptos allí donde va. Por cuenta de la salsa, Eugenio ha ido de congreso en congreso, de encuentro en encuentro: Puerto Rico, Cuba, Cádiz, Barcelona y Madrid. Las distancias no son obstáculo para alguien enganchado a la salsa.
Lo mismo le ocurre a Johanna, una madrileña licenciada en Derecho que se confiesa absolutamente 'encantada' con la salsa. 'Cuando oyes una canción de esta música, se te genera un bienestar, todo tu cuerpo se revoluciona. La salsa te llena por todos lados', relata Johanna.
El I Simposio Internacional de Salsa comenzó el pasado jueves con una gran fiesta de bienvenida en la sala La Riviera, el escenario del acontecimiento. Por las mañanas, los talleres se han llevado a cabo en el gimnasio Moscardó, en el número 93 de la calle del Pilar de Zaragoza. Al simposio han acudido bailarines especialmente traídos de Los Ángeles, Nueva York, Puerto Rico e Italia.
La fiesta salsera culmina esta noche con otra gran fiesta en la sala La Riviera, a partir de las 23.00.
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