El PP busca el contraataque

El Partido Popular ha ideado una campaña de imagen que, según insinuan algunos de sus responsables, será una de las más grandes de su historia, para preparar las próximas elecciones municipales y recuperar el protagonismo perdido como consecuencia de la intensa actividad socialista.

La idea es arrancar el lunes 11, con motivo de la presentación de la nueva macrofundación que presidirá José María Aznar cuando abandone el Gobierno. Y el objetivo es tanto contrarrestar el nuevo efecto PSOE como tranquilizar a su propio 'aparato', inquieto por la marcha de los acontecimientos y la falta de 'heredero'. 'El partido tiene que tener claro que no se va a adelantar la elección de candidato a la presidencia del Gobierno porque sería una locura ir a las municipales con dos dirigentes. Eso esta descartado', manifiesta uno de los responsables del PP.

El PP cree que en las municipales, el PNV no estará a la defensiva, como en las autonómicas, sino al ataque, y que eso puede aumentar la abstención entre sus filas

El PP ya no se siente tan seguro electoralmente como antes, según admite la mayoría de sus dirigentes. Ya no dudan de que José Luis Rodríguez Zapatero se ha consolidado como dirigente socialista y de que ha recompuesto el tejido del PSOE. Pero ese sentimiento, añade un miembro de la ejecutiva popular, tiene un lado positivo: 'Evitará que en el PP exista el exceso de confianza que padecimos en las últimas municipales. La organización tiene que movilizarse como en los mejores tiempos'.

'El PSOE está ahora satisfecho con la conmemoración del 82 y la proclamación de Zapatero, pero ya no será él, sino nuestro candidato, quien obtenga el protagonismo mediático el próximo otoño, que es cuando importa', insiste ese destacado dirigente, empeñado en enviar un mensaje de tranquilidad a los cargos intermedios.

Lo importante ahora, cara a las municipales, asegura, es recomponer la imagen del partido, 'algo desdibujada'. Y para ello, la campaña diseñada en Génova se centrará en dos puntos: menos impuestos y más seguridad.

Los expertos populares consideran que de todas las ideas lanzadas hasta ahora por la oposición, la más peligrosa es la crítica al fuerte aumento de la delincuencia. Contrarrestar esos datos se ha convertido en una exigencia, junto con la idea, defendida siempre por la dirección, de que las mejores armas del PP seguirán siendo la situación económica y la bajada de impuestos.

'El otro gran peligro sería que no llegáramos en buenas condiciones económicas a 2004', admite un diputado próximo al sector demócrata cristiano, para quien el aparato sigue confiando en la política de Aznar y Rato. Admite que 'es posible que haya aparecido alguna voz disidente' sobre la necesidad de mantener el déficit cero pase lo que pase, pero asegura que procedería 'del ámbito académico', y que no se ha traducido en propuestas concretas.

Orden de prioridades

'Nuestros análisis indican que las principales preocupaciones de los españoles son el paro, terrorismo, inmigración e inseguridad', asegura un miembro de la dirección del partido. Los populares niegan que ese análisis sea también el origen de las continuas insinuaciones de 'deslealtad' en temas antiterroristas que lanzan contra los socialistas, pero admiten que la idea late cada vez más en las intervenciones del PP. Varios dirigentes del PSOE han detectado esa deriva permanente en el Congreso de los Diputados y le han hecho llegar a Mariano Rajoy la advertencia de que no están dispuestos a soportarlos pasivamente.

'Ése es un tema que hay que tratar con cuidado', advierte un diputado popular vinculado a la política vasca, 'porque el resultado de las municipales en el País Vasco sigue siendo de una gran importancia para nosotros y no es posible acudir a esas elecciones enfrentados con los socialistas'. Según este experto, en esas elecciones es posible, por primera vez, que aumente la abstención en el PNV.

'Estas elecciones serán muy distintas a las autonómicas de hace un año', coincide otro dirigente del PP. 'En aquella ocasión, el PNV se sintió muy cómodo actuando a la defensiva y movilizando a sus votantes ante la idea de que estaban siendo atacados. Pero esta vez ocurre lo contrario: son ellos los que están al ataque, con el plan Ibarretxe'.

La insistencia socialista en el tema de la carestía de la vivienda preocupa sólo desde el punto de vista de la batalla de Madrid. El PP admite que la última etapa de Álvarez del Manzano ha sido mala. Incluso 'catastrófica', según un importante dirigente ligado al sector liberal. 'Pero frente a eso, sólo cabía la candidatura de Ruiz-Gallardón. Ahora hay que confiar en que Izquierda Unida no consiga revalidar sus datos en Madrid'. La preocupación es compartida, en sentido contrario, por el PSOE. La alcaldía de Trinidad Jiménez puede depender de los votos que consiga IU en Madrid ciudad.