Consejo de guerra en México contra dos generales

Dos generales mexicanos, el de brigada Arturo Acosta y el de división en retiro Francisco Quirós, son juzgados esta semana por un consejo de guerra como presuntos cómplices del capo narcotraficante Amado Carrillo Fuentes, dado por muerto en 1997 tras someterse a una cirugía plástica para cambiar el rostro. El proceso ha despertado inusitada atención. A los generales se les imputará en otro proceso, el primero de este tipo, el asesinato de 143 guerrilleros o activistas de izquierdas durante la guerra sucia de la década de los setenta..

Quirós, de 68 años, y Acosta, de 60, encarcelados desde agosto del año 2001, se declararon inocentes y rechazaron responder a las preguntas de la fiscalía, acogiéndose al derecho constitucional de guardar silencio. 'No puedo hablar sobre hechos en los que no participé y que probé que son falsos. Por tal motivo, no es mi deseo contestar a las preguntas del Ministerio Público Militar y de toda autoridad', dijo Acosta. El juicio, agregó el otro reo, demostrará la verdad, no las acusaciones de los testigos protegidos, filtradas a la prensa. Si son culpables, la sentencia puede alcanzar los 40 años de prisión.

Los dos militares fueron detenidos en agosto de 2000 acusados de haber protegido operaciones del mandamás del cartel de Juárez, Amado Carrillo, más conocido como El señor de los cielos. Los testigos de la fiscalía aseguraron que Carrillo y algunos miembros de su banda tuvieron contactos con Quirós y Acosta, a quienes sobornaron con dinero, automóviles de lujo y otros regalos. El ex director de la Policía Judicial Federal Adrián Carrera, un testigo protegido, afirmó haber servido de enlace para varios encuentros entre militares y narcos en un restaurante de Ciudad de México, a comienzos de la década de los noventa.

Los dos procesados, según ese testimonio, organizaron una telaraña de espías dentro de la Administración para proteger al cartel y adquirieron para ello 'equipo sofisticado de comunicación satelital (...) con la finalidad de construir una red que llegara a operar en todo el país', según publicó el diario El Universal. Los cargamentos de droga de Perú y Colombia cruzaban México, hacia EE UU, bajo la supervisión de Quirós y Acosta, según el ex funcionario.

El secretario (ministro) de Defensa, general Gerardo Clemente Vega García, anticipó que si el consejo de guerra determina su inocencia, la fiscalía probablemente apelará ante otro tribunal militar. La penetración de los carteles en la Administración del Estado es antigua. Durante el mandato de Ernesto Zedillo (1994-2000) fue detenido el propio zar antidrogas, general José Gutierrez Rebollo, ahora en prisión.

La vista contra los dos generales es novedad, porque en el pasado, los militares culpables eran dados de baja en secreto y no se informaba de los cargos. Durante el consejo de guerra, varios testigos involucraron a dos ex gobernadores del PRI, quienes supuestamente recibieron regalos de Carrillo, entre ellos 50 rifles AK-47 con munición dentro de una camioneta blindada. Y grupos de ex policías, agregaron, trabajaron de guardaespaldas o sirvientes de los hijos de Vicente y Amado Carrillo.