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El Gobierno quiere abrir centros de ayuda a inmigrantes en su país de origen

Son ya dos las comunidades autónomas que plantean la necesidad de abrir oficinas de orientación laboral para inmigrantes en sus países de origen. El conseller en cap del Ejecutivo catalán, Artur Mas, anunció el lunes que la propia Generalitat abrirá en unos días en Varsovia (Polonia) su primera oficina de este tipo y que prevé otras 10 más. Ayer, la consejera madrileña de Servicios Sociales, Pilar Martínez, propuso al Foro regional de la Inmigración exigir al Gabinete de José María Aznar la apertura de otros tres centros en Ecuador, Colombia y Rumania (los tres países con más presencia en la región). La Comunidad colaboraría en la formación profesional de los trabajadores extranjeros que quieran venir.

El cometido de estas oficinas sería informar a los ciudadanos de esos países de cómo emigrar legalmente a España y de ayudarles en la tramitación de los permisos, ahora complicada. Otra de sus misiones sería ofrecerles formación en los oficios para los que hay más demanda de trabajadores extranjeros.

Martínez considera imprescindible la creación de estas oficinas para que funcione el contingente (el número de permisos que el Gobierno concede cada año a trabajadores extranjeros para cubrir puestos laborales que no ocupa la población autóctona). Este año se preveía la llegada a España de 10.000 extranjeros para trabajos estables (2.285 de ellos a Madrid), pero, por ahora, sólo se han formalizado un 20% de los contratos previstos.

El propio Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales reconoce, en un informe interno, 'disfunciones' en el contingente de este año, que achaca a 'retrasos en la gestión' de las ofertas de empleo por 'falta de medios' y 'por errores importantes en la propuesta' del número de trabajadores necesarios. El Gobierno regional estima que en 2003 el mercado madrileño necesitará contratar en origen a 7.750 inmigrantes (5.650 para trabajos estables y 2.100 en temporales).

Punto débil en el contingente

La consejera no formuló ninguna crítica hacia el funcionamiento del contingente, pero admitió que 'hay algún punto débil'. 'Este sistema de contratación de trabajadores extranjeros en origen es muy reciente en España y a un recién nacido no se le puede pedir que sepa solfeo y canto. Por eso hay que mirar la experiencia de otros países con tradición migratoria, como los anglosajones, donde sí existen las oficinas que proponemos', añadió.

Servicios Sociales tiene en marcha tres cursos piloto de formación de inmigrantes en su país de origen: dos en Ecuador (en Cuenca y Loja) y uno en Enriquillo (República Dominicana). El objetivo es formar a 2.000 alumnos en profesiones para las que el mercado madrileño demanda trabajadores extranjeros (instalador eléctrico, panadero, fontanero...). 'Pretendemos ofrecerles una formación útil tanto para trabajar en su país como para encontrar empleo en nuestra región', concluyó la consejera.

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