'Lula quiere un nuevo pacto social con empresarios y trabajadores'

Luiz Soares Dulci, de 46 años, profesor de literatura, es el secretario general del Partido de los Trabajadores, o número dos de la formación. Fundador del PT junto a Lula, ha sido diputado y ocupó varios cargos en el Ayuntamiento de Belo Horizonte, capital del Estado de Minas Gerais.

Pregunta. ¿Qué Gobierno pondrá Lula si gana las elecciones?

Respuesta. La propuesta central de Lula es hacer un nuevo contrato social. Para ello quiere crear un Consejo de Desarrollo Económico y Social, con empresarios, trabajadores y otros sectores de la sociedad civil, para establecer metas en los ámbitos económico y social, integración de las Américas, Mercosur... La idea es lograr un gran pacto, no para 15 días, para superar la crisis, para hacer la transición y reducir nuestra excesiva dependencia de capitales volátiles de corto plazo. No habrá ningún problema con el capital extranjero que viene con inversiones, sean financieras o industriales.

P. ¿Cuáles serían las primeras medidas de un Gobierno del PT?

R. Vamos a lanzar desde el primer día un programa de combate nacional contra el hambre. Pondremos en marcha un plan nacional de seguridad, que incluye creación del primer empleo y formación para los jóvenes de las favelas, y paralelamente combatirá el crimen organizado, que se ha desarrollado en los últimos diez años y que ha llegado a ocupar parcelas del Estado en algunas partes del país. En política internacional, el primer viaje que Lula hará como presidente será a Argentina por solidaridad con el país vecino y para dar una señal de nuestro compromiso con el Mercosur. Luego irá a EE UU y a Europa.

P. Se acusa a Lula de hacer promesas que no podrá cumplir.

R. Lula es el candidato que menos promesas ha hecho. Cuando ha dicho que Brasil necesita 10 millones de nuevos empleos, una parte de la prensa publicó que prometió crear 10 millones de puestos de trabajo. Falso. Lo único que ha precisado Lula es que tenemos una base de ocho millones de desempleados y cada año un millón y medio de jóvenes llega al mercado de trabajo.

P. ¿Teme que puedan frustrarse las enormes expectativas populares ante una victoria de Lula?

R. Para nosotros es una preocupación estar a la altura de las expectativas. Pero, debido a la crisis de los últimos cinco meses, la población no espera grandes cambios a corto plazo. La gente sabe que la situación es difícil y que los cambios más ambiciosos tardarán un poco.