Josh Lucas, el nuevo 'sex symbol' americano

En las tres últimas semanas Josh Lucas ha pasado de ser un desconocido a casi atropellar a las fans que se abalanzan sobre su coche. No da crédito. Todo por el éxito en taquilla, 88 millones de dólares en menos de un mes, de la comedia romántica Sweet home Alabama que protagoniza junto a la actriz de moda, Reese Witherspoon (Una rubia muy legal). El actor promocionó ayer en Madrid la cinta, que se estrenará en España el próximo 8 de noviembre.

El actor Josh Lucas, de 31 años, lleva concedidas alrededor de 700 entrevistas de promoción de Sweet home Alabama, pero ayer en Madrid contestaba a la prensa como si fuese la primera vez. Dice haber tenido muy mala suerte en sus 15 años de carrera y ahora se siente feliz con el éxito de este largometraje, que, en su opinión, está funcionado tan bien 'porque Estados Unidos está muy revuelto política y socialmente, y la gente necesita historias como ésta, romántica, para evadirse'.

Sweet home Alabama cuenta la historia de Melanie (Resse Witherspoon), una diseñadora de moda que está prometida al 'soltero de oro' de Nueva York, pero que, antes de seguir con sus planes, debe divorciarse de Jake, un chico de su pueblo de Alabama, que se niega. Tras siete años fuera de casa, ella vuelve y se enfrenta a su pasado. 'El sur de Estados Unidos está muy orgulloso de su historia y mantiene sus diferencias. Esta película hace hincapié en que, aunque el sur es pobre y racista, hay gente inteligente, y en él se inculca la hospitalidad con el forastero', afirma el actor, que reside en Nueva York pero que se crió en Arkansas. 'El filme parte de los clichés sobre el sur, pero no se queda ahí y profundiza en sus costumbres. Por una vez es una visión justa', asegura Lucas, que tuvo pequeños papeles en Una mente maravillosa y American psycho. Estos clichés dejan estupefacto al espectador europeo: 50.000 personas reviven cada fin de semana la guerra civil de Estados Unidos, con sus disfraces de época, y en la cinta se ven secuencias de esas batallas ficticias. 'Es algo muy común. Por ejemplo, Ted Turner, el magnate de la CNN, participa a veces. A algunos les molestó que se rodara en plena batalla', cuenta.

De su compañera de reparto, Reese Witherspoon, protagonista de Una rubia muy legal, se habla como 'la próxima novia de América', pero él no lo tiene claro. 'Rees es una excelente actriz, pero tiene mucha presión del público. Es muy joven, está casada, tiene un hijo y no lo está llevando bien'. Piensa y critica que en Hollywood se recompensan las extravagancias y el egocentrismo de los actores: 'Es surrealista que cuanto peor se comportan algunos, más se lo permitan'.

Personaje antagónico

Lucas interpreta al malo Glen Talbott en la esperada versión cinematográfica de La Masa, El increíble Hulk, de Ang Lee, que se estrenará en 2003. 'Mi personaje es justamente lo contrario del de Sweet home Alabama. Muy peligroso y egocéntrico. Ang Lee quería hacer una película con total libertad y ha conseguido que le soltaran 160 millones de dólares sin que los productores hayan visto nada. Eso no pasaba desde Apocalypse now, de Francis Ford Coppola, que se estrenó en 1979', afirma. Y asegura que ninguno de los actores conocía la serie o los cómics, porque el director quería que así fuese. 'Hulk no es una película de franquicia, sino un estudio profundo sobre la rabia. Una meditación sobre cómo la opresión psicológica íntima, sin exteriorizarla, puede cambiar a las personas'.

El actor, que no quiere encasillarse en papeles románticos, rueda en la actualidad Wonderland junto a Val Kilmer, y confía en digerir el éxito. 'Si me dejo llevar me convertiré en una estrella, y es lo que no quiero', concluye.