El amigo Bruce Springsteen

Bruce Springsteen es un gran amigo de Barcelona y como tal tiene que ser reconocido por la ciudad. Si alguna vez es alcalde, Xavier Trias piensa dedicar buena parte de sus esfuerzos a lograr este reconocimiento, en compensación de que en su concierto dijera unas palabras en catalán. Trias lo dijo ayer en una conferencia de prensa convocada para hablar del AVE.

Trias no expresó la más mínima duda sobre el cumplimiento del calendario por parte del Gobierno central. No tiene, o al menos no las citó, ni siquiera las dudas que sí ha expresado el presidente del Gobierno catalán, Jordi Pujol. El año 2004 será grande para Barcelona, aseguró el candidato de CiU a la alcaldía, porque el AVE llegará y lo hará en una vía de ancho europeo.

También habló de Trinidad Jiménez, candidata socialista a la alcaldía de Madrid, que anteayer propuso trasladar el Senado a Barcelona. Pero Trias se fijó en otra cosa: Jiménez sugirió que la necesidad de dominar un idioma más (el catalán) es un freno para que algunas empresas extranjeras se instalen en Cataluña. Según Trias, decir esto es insultar a todos y cada uno de los barceloneses. Y lo peor: la culpa no es de Trinidad Jiménez, sino de Joan Clos, que la invitó a Barcelona y no le explicó lo que tenía que decir.

No acaba ahí la cosa, dijo un Trias en apariencia muy indignado, el otro candidato a la alcaldía de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón (PP), también ha dicho cosas así en alguna ocasión. Culpa, una vez más, de Clos. 'Cuando yo sea alcalde esto no pasará y daré una respuesta adecuada', dijo, sin especificar en qué consistiría la respuesta.

Intervino también el presidente del grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento barcelonés, Joan Puigdollers, quien anunció que ha presentado dos alegaciones a las obras de Sants y la Sagrera relacionadas con el AVE.

En estas alegaciones, CiU reclama mayor atención a la vivienda pública de alquiler para jóvenes y que se realice, tanto en Sants como en la Sagrera, una declaración de impacto ambiental. Los trámites de la declaración no han bajado nunca de un año, lo que supondría otra dificultad añadida a las que ya tiene el calendario del AVE.