'No queremos ser una televisión casposa'

La continuidad es la clave en el nombramiento del sociólogo Juan Menor (Madrid, 1957), nuevo director de Televisión Española, 'asustado y halagado' por la buena acogida que tuvo su designación hace apenas dos semanas entre los miembros del Consejo de Administración del Ente Público. Continuidad en el equipo, 'con algunos cambios, que aún estoy pensando, aunque intentaré contar con casi todos', asegura. También, 'cuando el nuevo director general de RTVE, José Antonio Sánchez, apuesta por mí, lo está haciendo por esa línea de continuidad. No de pararse, porque es un proyecto en marcha', reconoce el hasta ahora director de programas y antena, mano derecha del dimitido Álvaro de la Riva.

Pregunta. ¿Y cómo sigue rodando el proyecto tras el tijeretazo de la SEPI (Sociedad Española de Participaciones Industriales, encargada de sanear las cuentas del Ente), 93 millones de euros menos para este año, uno de los motivos con los que se quiere justificar la marcha de De la Riva?

Respuesta. La clave puede estar en no obsesionarse con ganar todos los meses, con perder una franja horaria de un día... Hay que ser líder, queremos serlo porque debemos ocupar una posición central en la sociedad. Pero dicho esto, la única observación que hago a la gestión del pasado es el haber pagado sobrecostes por no perder el liderazgo. Aunque los grandes contenidos no los vamos a perder.

P. ¿Es el caso del fútbol?

R. El fútbol debe estar en Televisión Española. Me apetece sobre todo la selección nacional. Me parece vital, es un contenido muy propio de televisión pública. Hacemos un gran esfuerzo, gastamos muchas energías, mucho dinero en la producción de cantidad de deportes minoritarios. ¿Cómo no vamos a estar en los grandes eventos futbolísticos? Ahora, ante un acontecimiento puntual, cuando se está reclamando un sobreprecio desmesurado a costa del contribuyente, ¿tiene sentido? Pues no creo que todo valga a cualquier precio. Dicho lo cual, vamos a luchar por todos los derechos de fútbol importantes.

P. ¿También se puede ahorrar produciendo espacios sin encargarlos fuera de la casa, como se ha empezado a hacer con la telenovela de sobremesa Géminis?

R. Definitivamente sí. TVE como fábrica de ficción tenía un sello de calidad indiscutible en el caso de las producciones artesanales (grandes series, Estudio 1...). Pero con una telenovela como Géminis, que exige un ritmo diario, de producción industrial, se ha demostrado que somos capaces. Han caído algunos mitos. Se han dicho muchas tonterías, que si aquí toca la sirena, que si la hora del bocadillo... Pues mentira. Hay un buen proyecto, una buena dirección, un buen equipo y, fundamentalmente, un equipo ilusionado. Vamos a potenciar esa dimensión con productos de entretenimiento musical. ¿Y por qué no series de prime time? Vamos a trabajar en esa línea, con los medios que hemos demostrado que tenemos y con la contención de costes que hemos demostrado que somos capaces de tener.

P. ¿Ficción propia para plantar cara a las producciones nacionales de las cadenas privadas?

R. Sí, ése ha sido uno de los fallos que se empezó a rectificar la temporada pasada. Entre los miedos a no hacer determinadas cosas y los fracasos se han perdido algunas cosas que podrían haber estado en TVE, productos magníficos (Farmacia de guardia, muchos de la factoría Globomedia que ha hecho para Tele 5...), muy dignos para una televisión pública. Hemos ido por detrás y teníamos que innovar con algo diferente. De ahí salió Cuéntame cómo pasó. Y tendremos que seguir haciéndolo así, a lo mejor no necesariamente con grandes audiencias, porque no son fácilmente repetibles fenómenos como ése, pero escociendo un poquito.

P. En el terreno del entretenimiento, a través de Operación Triunfo entra en Televisión Española (tanto La Primera como La 2) un público más joven. ¿Ha abierto un hueco en la parrilla para espacios como El show de Flo?

R. El show de Flo no habríamos podido programarlo hace un año. Queremos demostrar que podemos hacer parodias, que nos reímos de nosotros mismos. Como no podemos ser demasiado transgresores sabemos que no podemos llegar a niveles de audiencia muy altos. Así que si no se consiguen no pasa nada, nuestro objetivo es modesto. No queremos revolucionar nada, sino ir pasito a pasito hasta hacer una televisión que si la comparas con la de hace unos años no te lo crees. La sociedad española es moderna y nosotros también queremos serlo, no queremos ser una televisión casposa. Y a partir de ahí...

P. ¿Qué?

R. Si hay alguna asignatura que hemos aprobado pero tenemos que mejorar un poco es la cultural. No por el número de horas. Lo tenemos muy segmentado, muy poco ordenado y a veces es un poco intemporal. Debemos hacer algo más integral, más moderno, para que mucha gente se enganche, y más actual, más periodístico. No sólo en La 2. Incluso en el prime time de La Primera, como en el caso del proyecto de la historia de España que Fernando García de Cortázar dirige actualmente.

P. ¿Y la batalla por el late night?

R. Ahí no, ahí me rindo de momento. Está tan difícil, el listón está tan alto, hay líneas que está tan claro que no podemos cruzar... Es más prudente la retirada.