Chaves y Pujol defienden la integración de los inmigrantes sin perder las señas de identidad

'Ni los catalanes se han aprovechado del resto de los españoles, ni los andaluces hemos vividos a costa de los españoles'. El presidente de la Junta, Manuel Chaves, rechazó ayer el 'abuso' de los tópicos sobre Andalucía y Cataluña durante la inauguración en Sevilla de la exposición Cataluña, tierra de acogida, a la que asistió el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. Chaves y Pujol se refirieron a la inmigración. El primero dijo que hay abordarla desde la 'multiculturalidad'. El segundo agregó que los que vienen deben respetar también la 'personalidad' de la tierra.

Jordi Pujol puso fin en Sevilla a la itinerancia de la exposición -inaugurada por los Reyes en Madrid en mayo de 2001-, que se enmarca en una ambiciosa campaña de la Generalitat para contrarrestar la mala imagen que, según las encuestas que maneja el Gobierno catalán, tiene esta comunidad en el resto de España. En consonancia con este objetivo, el presidente de la Generalitat, que ha permanecido dos días en la capital andaluza, procuró esquivar las declaraciones públicas que pudieran desviar la atención hacia otros focos (no lo consiguió con el PER) y se esforzó en explicar cómo son los catalanes.

El pie que le brindó Manuel Chaves en su discurso al hermanar a ambas comunidades como 'tierras de inmigración' fue una oportunidad para hablar también de cómo tienen que comportarse los que llegan de fuera. Pujol destacó que el modelo en que se asienta Cataluña pone el acento en el progreso económico, la paz, la convivencia y el respeto al derecho de las personas, pero igualmente en el 'deber de los que vienen de respetar nuestra propia personalidad'. 'Tenemos que reclamar a los que vengan que nos ayuden a no descomponernos', subrayó.

El presidente de la Generalitat dijo que lo importante es tener un proyecto común, y que el de su comunidad consiste en ser un pueblo 'sólido, internamente bien estructurado, justo, capaz de acometer empresas, no anclado en el pasado, pero no ignorante del pasado'.

Manuel Chaves se había referido con anterioridad a los tópicos que 'tanto daño' han infringido a Andalucía y Cataluña, al consolidar una imagen 'distorsionada de la realidad', y con una frase cruzada repartió 'fotos desenfocadas' para los dos territorios: 'Ni los catalanes se han aprovechado del resto de los españoles, ni los andaluces hemos vivido a costa del resto de los españoles'. El presidente de la Junta halló otras similitudes entre Andalucía y Cataluña, tales como las de aportar al 'al acervo común de España nombres insignes en el campo de las artes, la creación y el pensamiento', y 'la singularidad' en el desarrollo del Estado de las Autonomías. También la inmigración: 'En Andalucía venimos trabajando los últimos 20 años para hacer imposible que vuelva lo que vivieron los andaluces en la década de los sesenta. La situación ha cambiado, Andalucía ha pasado de ser tierra de emigración a tierra de inmigración'. Chaves agregó que el 'fenómeno de la inmigración' conduce a sociedades 'multiculturales' y se debe favorecer el entendimiento y no el enfrentamiento. El presidente andaluz piropeó por último la exposión Cataluña, tierra de acogida y su significado: 'Es una buena demostración de lo que ha representado la confluencia de una sociedad pujante y emprendedora con los impulsos laborales, profesionales y culturales de personas llegadas de fuera'.

En un almuerzo organizado por la Cámara de Comercio y la confederación empresarial sevillana, Jordi Pujol valoró la política de déficit cero del Gobierno recogida en los presupuestos generales de 2003, aunque apuntó que realmente se mueve en torno al 0,5% al aplicar el superávit de la Seguridad Social, y afirmó que Andalucía tienen 'razón' cuando critica que se exija en las cuentas autonómicas el déficit cero cuando no pueden recurrir a la Seguridad Social, informa Europa Press. Además, expresó su agrado por que el 'esfuerzo que han hecho los catalanes por el reequilibrio territorial se haya aprovechado bien en Andalucía'.

El presidente de la Generalitat aprovechó la víspera de la inauguración para peregrinar por sendas hermandades de la Semana Santa sevillana vinculadas con catalanes y presidió ayer la apertura de la muestra De Gaudí a Tàpies. Maestros catalanes del siglo XX en el Museo de Bellas Artes de Sevilla.