La muerta al caer de un séptimo piso quería saltar por la ventana a la cocina

La joven brasileña que falleció el lunes al caer desde el séptimo piso de un hostal de la Gran Vía madrileña se precipitó al vacío cuando intentaba acceder, a través de una ventana, a la cocina del establecimiento, que en ese momento estaba cerrada.

Según fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, el compañero sentimental de la joven fue puesto en libertad ese mismo día por la noche después de declarar en comisaría en calidad de detenido, ya que los agentes desconocían si la mujer había caído accidentalmente.

El suceso se produjo a primera hora del lunes, cuando Adriana Oliveira Álvarez, de 25 años, se precipitó desde un séptimo piso del número 44 de la Gran Vía (distrito Centro). Su compañero sentimental, Roger Felipe S. P., de 48 años, aseguró a la policía que en ese momento estaba con su pareja en el hostal, que ambos habían ingerido gran cantidad de alcohol y que tuvieron una discusión.

A continuación, según la versión del novio de la fallecida, a su compañera le entró hambre y cuando fue a la cocina del hostal la encontró cerrada, por lo que intentó acceder a ella a través de una ventana. Fue en ese momento, según indicaron las citadas fuentes, cuando la mujer se cayó al vacío.