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China censura Internet en vísperas del congreso comunista

Las autoridades bloquean el buscador Google y cierran locales

Google, el popular buscador de Internet, se ha perdido en China. Desde hace días, la herramienta que utilizan millones de internautas para localizar información en el maremágnum de la Red está bloqueada. Cuando se teclea su dirección, la respuesta llega como un portazo virtual: 'No se puede mostrar la página'. Según el portal chino NetEase.com, la razón es que el buscador permite acceder a páginas de pornografía, a contenidos asociados con el movimiento espiritual Falun Gong, tildado por Pekín de 'culto diabólico', y a información considerada perjudicial para la seguridad nacional.

Algunos observadores políticos han ligado esta medida, aparentemente ordenada por el Gobierno, a la celebración del XVI Congreso Nacional del Partido Comunista Chino, que comenzará el 8 de noviembre. Ya en otras ocasiones políticamente sensibles, las autoridades han intensificado los controles en Internet. Pero, según los analistas, es la primera vez que el estricto sistema de censura que ejerce sobre la Red impide el funcionamiento de un buscador.

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Hace una semana, el presidente chino, Jiang Zemin, congregó a los responsables de propaganda del partido de todo el país para darles unas instrucciones muy claras: hay que crear una atmósfera apropiada ante la celebración del congreso. Jiang dijo que era una prioridad del trabajo ideológico del partido y urgió a los medios de comunicación a hacer mayores esfuerzos para mostrar al público el progreso que ha experimentado el país en las dos últimas décadas bajo la dirección comunista.

Las autoridades no ocultan que ejercen un férreo control sobre Internet. Recientemente, la policía informó de que 2.000 cibercafés de la provincia sureña de Guangdong han sido equipados con un programa que impide a los usuarios conectarse a webs con contenidos pornográficos. El pasado 16 de junio, un incendio provocado por unos adolescentes en un cibercafé en Pekín por no haberles dejado utilizar los ordenadores causó la muerte de 25 personas. Dos de ellos fueron condenados a cadena perpetua. Desde entonces, las autoridades han anunciado el cierre de 150.000 locales en todo el país que no poseen licencia.

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