Orefici, principal condenado por el 'caso Intelhorce', localizado en Kenia

El empresario italiano Giovanni Orefici, condenado a 17 años de cárcel por la Audiencia de Málaga como principal responsable de la descapitalización de la firma textil malagueña Intelhorce, ha sido localizado por la policía en Kenia, según un telegrama remitido al Ministerio de Justicia desde la Embajada española en Nairobi y difundido ayer por la agencia Efe.

En el telegrama, que se ha hecho llegar también a la Sección Tercera de la Audiencia de Málaga, se explica que no se podrá proceder a la detención del empresario -en situación de busca y captura en España desde abril de 2001- hasta 'contar con una orden internacional de arresto debidamente firmada por el juzgado competente y legalizada por el fiscal en España'.

Orefici ha sido localizado por la policía en varias ocasiones desde que decidiera fugarse tras conocer la sentencia que le condenaba a 17 años de cárcel por estafa, falsedad documental y delitos contra la Hacienda Pública en el caso Intelhorce.

A finales de abril del pasado año, apenas unos días después de anunciar su intención de recurrir el fallo de la Audiencia Provincial, el empresario huyó de España y se refugió en la localidad italiana de Massa. Cuatro meses más tarde, en agosto, se entregó voluntariamente en la prefectura de policía de esa ciudad. Orefici llegó a pasar unos días en la cárcel, y posteriormente la justicia italiana decretó que permaneciera bajo arresto domiciliario en su casa de Cremona, cerca de Milán, hasta que los tribunales se pronunciasen sobre la petición de extradición que habían cursado las autoridades españolas.

Sin embargo, en febrero de este año, Giovanni Orefici logró burlar a la policía italiana y se marchó fuera del país. Ahora la Audiencia de Málaga cursará la orden internacional de arresto para intentar que el empresario regrese a España para cumplir su condena.

La fuga de Orefici es el último capítulo de uno de los procesos más largos y tortuosos de la historia judicial española. El escándalo de la descapitalización de la textil malagueña Intelhorce se destapó a finales de 1994 y alcanzó a altos cargos del anterior Gobierno socialista, que tuvieron que declarar en calidad de testigos o como imputados para responder de los casi 6.000 millones de pesetas en ayudas públicas que obtuvo Orefici cuando asumió la titularidad de la fábrica, que anteriormente había pertenecido al Estado.

Finalmente sólo fueron condenadas 7 personas de las 39 que llegaron a sentarse en el banquillo.