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Una pasmosa resurrección discográfica

Diego A. Manrique

Cosas veredes: Elvis ha vuelto a ser nº 1 con una potente remezcla de A little less conversation, un tema de 1968. No hubiera sido posible sin la presencia en puestos claves de admiradores europeos. Incluyendo un español, José María Cámara, vicepresidente de BMG en Nueva York. Recuerda Cámara: 'Me llamaron desde Londres. Nike quería usar la remezcla en un spot con temática futbolística, pero pagaba 200.000 dólares y BMG quería un millón'. Nike invertía cien millones de dólares y ayudaría a rejuvenecer el perfil de los consumidores de Elvis. Ante la posibilidad de que se recurriera a un imitador, como en el anuncio de Audi con el muñequito de Elvis, Cámara logró que BMG aceptara los 200.000 dólares.

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Con una condición: el autor de la remezcla era el DJ holandés Junkie XL. Conocida la pasión de Elvis por las drogas, 'hubiera sido feo usar la palabra yonqui'. Apareció como JXL en el CD, con la remezcla más la grabación de 1968. BMG es propietaria de casi todo lo grabado por Elvis -que vendió sus derechos en 1973-, pero procura llevarse bien con la empresa que gestiona su herencia. Cámara voló a Memphis con la remezcla 'y alucinaron: no era necesario, pero lo aprobaron y se están haciendo otras'.

Ahora llega Elvis: 30 number ones, antología que dejara boquiabiertos a los que conozcan el sonido original. David Bendeth, londinense que ejerce de cazatalentos en BMG, ha sido el responsable de la restauración sonora. Se empapó Elvis Presley: a life in music, libro que analiza cada sesión de grabación de Elvis, de Ernst Jorgensten, un danés que ha terminado como empleado de BMG. Después acudió a los masters originales, almacenados en un lugar secreto: 'Digitalizamos los 30 éxitos, revisando la ecualización, la compresión, la presencia de cada elemento. No se ha quitado o añadido nada, pero todo, instrumentación y voces, tiene ahora una presencia increíble'. Para Bendeth, la experiencia fue reveladora: 'Sabía que era un gran vocalista, pero lo impresionante es cómo hacía los discos, cantando en directo con la banda tocando detrás. Los técnicos también eran unos genios en la colocación de micros, y lo mismo los productores'.

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