Decepción

La decepción de los inversores estadounidenses por la decisión de la Reserva Federal de no bajar los tipos de interés, al tiempo que reconocía que la economía atraviesa una situación realmente delicada, ha tenido como primera consecuencia una nueva e importante caída de las cotizaciones que se ha trasladado con facilidad a los mercados europeos.

El Ibex 35 perdió el 2,66% y el índice general de la Bolsa de Madrid el 2,30% y con una contratación en el Mercado Continuo inferior a los 900 millones de euros.

Las pérdidas en Europa tuvieron como protagonistas destacados a los valores bancarios, cuyas cuentas empiezan a reflejar con crudeza los efectos de la larga crisis económica.

En el mercado español las acciones del BBVA perdían el 4,34%, y las del SCH, el 5,59%. Las otras tres grandes empresas con intereses en Latinoamérica se sumaron a esa tendencia y poco antes del cierre pusieron el mercado al borde de un ataque de nervios, cuando el Ibex 35 llegó a perder el nivel de los 6.100 puntos y se acercaba nuevamente a toda velocidad a la zona de mínimos.

La ausencia de compradores en el mercado español sigue siendo la pauta principal en estas sesiones y no parece que vaya a mejorar en los próximos días. Hoy es jornada festiva en el mercado español y el viernes vencen los contratos de opciones y futuros, dos argumentos más para que los pequeños inversores decidan mantenerse al margen, sobre todo cuando es la bolsa estadounidense la que ha tomado las riendas.

Ayer, la sesión discurría sin grandes movimientos en el mercado español hasta que poco antes de la apertura de Wall Street los contratos de futuros anticipaban una caída importante del precio de las acciones. El desmantelamiento apresurado de posiciones fue una consecuencia casi lógica, dadas las circunstancias.