Turistas franceses denuncian una estafa inmobiliaria en la Costa Brava

Ni vistas al mar, ni precios interesantes, ni vacaciones fantásticas. Esto es con lo que se han encontrado al menos decenas de turistas franceses que pretendían pasar unos días de descanso en la Costa Brava. Sus inolvidables vacaciones se han convertido en un fiasco. Las víctimas fueron engañadas por una pareja de nacionalidad francesa, a la que los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil siguen buscando como presuntos autores de un delito de estafa inmobiliaria. La comisaría de Roses (Alt Empordà) ha recibido des del pasado 16 de julio un total de 36 denuncias, pero la cifra podría ascender a centenares de afectados en Francia. No se descarta que la estafa se pueda repetir en otros puntos turísticos del litoral español.

Los sospechosos, que utilizaban distintas identidades, atrajeron a sus víctimas a través de varios anuncios publicados en revistas y diarios gratuitos, donde se les ofrecían alquileres de apartamentos con vistas al mar a precios reducidos en Roses, Empuriabrava y Lloret de Mar, en la Costa Brava, en plena temporada alta. Los turistas contactaban con los estafadores a través de un número de teléfono móvil donde se les pedía un pago anticipado para la reserva que oscilaba entre los 180 y 450 euros.