Maragall anuncia un exhaustivo control al Gobierno catalán para acabar con 'los favores privados'

Los socialistas no darán tregua al Gobierno catalán. El líder del PSC, Pasqual Maragall, anunció ayer que su partido emprenderá una exhaustiva acción fiscalizadora de todos los departamentos de la Generalitat, con preauditorías incluidas, para acabar con la 'irresponsabilidad, desenfreno y favores privados'. Maragall y el PSC no están dispuestos a que 'se pierda otro año' y continúe la 'incompetencia, desorientación y atasco de un Gobierno en retirada'.

El millonario trasvase de fondos económicos de diversos departamentos de la Generalitat hacia Presidencia, que el PSC vincula a la promoción del conseller en cap, Artur Mas, como candidato de CiU, ha acabado por colmar la paciencia de los socialistas. Y creen, a 15 meses de las elecciones autonómicas, que ha llegado el momento para, además de presentar sus propuestas alternativas, denunciar la 'irresponsabilidad' de los gobernantes de CiU e impedir 'que un Gobierno malo lo sea del todo y hunda al país', en palabras de Maragall.

El candidato socialista no se abstuvo ayer de arremeter contra el Gobierno de Jordi Pujol, que vive, dijo, 'un final de etapa con un proyecto agotado'. A partir de ahora, el PSC observará con lupa cada paso del Ejecutivo catalán, desde cada euro que se gaste hasta las reuniones que mantenga. Y no permitirá que CiU continúe confundiendo los intereses de partido con los gubernamentales como hizo Pujol, según Maragall, al reunir a la ejecutiva de la federación con los miembros del Consell Executiu en el Palau de la Generalitat.

El PSC aprovechará sus contactos dentro del entramado gubernamental y la multitud de información que reciben sus parlamentarios. 'Aseguraremos', agregó el líder del PSC, 'los mecanismos de gobernabilidad y de suficiencia financiera de los futuros gobiernos'. Maragall también reclamó la complicidad de la sociedad catalana para 'arreglar el futuro del país'.

Una vez en el poder, adelantó Maragall, el PSC 'sabrá aprovechar los buenos proyectos y los buenos administradores, que los hay, pero que ahora no tienen ni dirección ni estímulo'. 'Contamos con ellos', manifestó, 'para empezar a poner orden en la casa'. Maragall lamentó que el Ejecutivo de CiU dedique sus esfuerzos a 'colonizar' a la sociedad civil 'con proyectos privados del entorno del Gobierno y del partido en el terreno económico, mediático y político cultural', como cree que sucede en La Caixa, Òmnium Cultural o el Institut d'Estudis Catalans.