Mário Soares aboga por crear de una legislación internacional para evitar la especulación

El ex presidente de la Republica de Portugal Mário Soares abogó hoy por la creación de "una reglamentación ética a nivel internacional, con el fin de solucionar de alguna manera la pobreza mundial". Así, en contraposición "a lo que muchos denominan globalización salvaje" el que fuera galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en 1995, se refirió a la "globalización ética, ya que no sólo se reduce a un mero fenómeno económico, sino que va más allá y se convierte en un fenómeno cultural gracias a la revolución informática y tecnológica".

En la conferencia inaugural de los cursos de verano que la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) celebra en La Rábida (Huelva), Soares culpó a la globalización "exclusivamente económica" de la falta de soluciones ante el hambre, la criminalidad organizada o enfermedades como el Sida. Por este motivo, Mário Soares defendió en su conferencia 'Por una globalización ética' la creación de una tasa de cumplimiento internacional que regule la especulación para evitar "desastres como el que se ha vivido en Argentina".

Según el ex dirigente portugués, "ahora se tiene que hablar de un imperio del capital, localizado fundamentalmente en Estados Unidos", un país que, según auguró, "puede convertirse en la víctima de sus propio imperio".

"Es necesaria una reglamentación ética, a través de una nueva actuación mundial, -añadió-" para que se cree un sentimiento cívico que se manifieste mediante actuaciones pacíficas". De esta manera, el ex presidente de Portugal recordó los violentos acontecimientos acaecidos el verano pasado en Génova, durante la cumbre del G-8 celebrada en esta cuidad italiana, y defendió el espíritu del Foro Social de Porto Alegre, en Brasil.

Además, en el acto de inauguración, al que asistieron, entre otros, la consejera de Educación y Ciencia de la Junta, Cándida Martínez, el rector de la UNIA, José María Martín Delgado, también participó la directora de La Rábida, María Antonia Peña, quien destacó la vocación de esta sede iberoamericana de "contribuir de manera integral al desarrollo económico y social de América Latina, utilizando un mecanismo silencioso, que no es otro que la formación de su capital humano".

Los 18 cursos de verano de La Rábida, que se desarrollarán hasta finales del mes de agosto, centrarán su atención en la temática de carácter social, como la globalización o los movimientos migratorios, entre otros.