El ministro de Justicia israelí condena las acciones vandálicas cometidas por colonos judíos

El ministro israelí de Justicia, Meir Sherit, ha condenado las acciones vandálicas cometidas por un grupo de colonos de Hebrón, que se saldaron con la muerte de una joven palestina. Sherit declaraba que los responsables de los disturbios deben ser tratados con "puño de hierro". Por otra parte, el presidente palestino, Yasir Arafat, ha asegurado que sigue trabajando para alcanzar el alto el fuego, a pesar del reciente asesinato del líder del brazo armado de Hamás, Salaj Shejade.

El titular israelí de Justicia y destacado miembro del Likud, Meir Sherit, criticó los actos de vandalismo ocurridos el día anterior en el casco antiguo de la ciudad de Hebrón. "Estoy en contra de que la gente se tome la ley por su mano", declaró, partidario del procesamiento de los responsables de los atropellos cometidos en venganza por el asesinato de un colono del asentamiento de Abraham Avino.

Sherit argumentó que el dolor de los familiares de las víctimas del terrorismo no puede convertirse en excusa para justificar los comportamientos abusivos contra civiles inocentes. Pero, a pesar de las palabras del ministro, la policía puso en libertad a los cuatro colonos detenidos tras los disturbios, después de que el juez de guardia considerara que no disponía de suficientes cargos contra ellos.

"El problema está en que a los colonos se les aplica la jurisdicción civil y a los palestinos nos aplican la jurisdicción militar", señala Rafi Al-Yabari, de 23 años, coordinador de un centro para la promoción de la no violencia situado a escasos metros de la terraza en la que fue alcanzada la joven de 14 años fallecida el día anterior. Según Al-Yabari, esto hace que sea muy fácil condenar a un palestino, mientras que dificulta enormemente la labor de las fuerzas de seguridad israelíes a la hora de hacer cumplir la ley a los colonos judíos.

Hussein, el padre de Ajmed Natche, el niño de 8 años que recibió una puñalada en la espalda, se mostraba escéptico sobre la posibilidad de que la Policía israelí encuentre al colono que acuchilló a su hijo. "Era un hombre de unos sesenta años, de tez blanca, pelo canoso y barba larga", declaraba Hussein. "Estoy seguro que le reconocería si le volviera a ver, pero dudo que luego hagan nada contra él", declaraba, asegurando que ningún inspector ha pasado todavía por su vivienda para intentar esclarecer la identidad del atacante.

Arafat promueve el alto el fuego

El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasir Arafat, afirmó que sigue trabajando en pos de una tregua unilateral por parte de las milicias del Tanzim y el movimiento islamista Hamás. Tras reunirse en sus oficinas de Ramala con el activista de derechos humanos estadounidense Jesse Jackson, Arafat declaró que habían "alcanzado un acuerdo, pero fue aniquilado por el ataque del F-16", refiriéndose al reciente asesinato del jefe del brazo armado de Hamás, Salaj Shejade, que causó además la muerte a quince civiles.

El presidente de la prestigiosa comisión de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knesset, Haim Ramón, confirmó disponer de un documento interno de la ANP que prueba lo dicho por Arafat. Ramón pidió aclaraciones al titular de Defensa y compañero de partido, Benjamín Ben Eliécer, quien a su vez aseguró que Shejade planeaba un atentado séxtuple, que hubiera afectado simultáneamente a seis ciudades israelíes.