El 'manga' como forma de vida
El Salón del Cómic de Málaga ofrece una variada oferta para los aficionados
Su piel clara y sus ojos rasgados hacen que Irene Pérez tenga cierta apariencia oriental. Pero es su peluca blanca y su disfraz de Suu, la protagonista del cómic Clover, lo que definitivamente acerca su aspecto al de un dibujo manga, como salida de una película de Katsuhiro Otomo o Hayo Miyazaki. Irene estudia tercero de Publicidad y Relaciones Públicas y junto a otros dos amigos han montado un estudio de dibujo, creación de páginas web, cómics y diseño gráfico.
Es una de las organizadoras del segundo Salón del Cómic de Málaga, que empezó ayer, y ha sido su empresa, Namida, la que ha realizado toda la cartelería de este evento, que se va a celebrar durante el fin de semana. 'Comencé de pequeña viendo Heidi, Candy y todos esos dibujos manga que ponían en la televisión. Hay muchos que se quedan ahí. Otros seguimos y nos aficionamos, igual que lo puedes hacer a la lectura. Yo además de admirar la belleza estética de los dibujos, aprendo y me entretengo', dice Irene.
José Antonio Góvez es uno de sus compañeros del estudio. 'Dentro del manga existen todos los géneros, como en la literatura. Hay desde cosas para niños hasta amor, terror, obras de autor, surrealismo...', dice José Antonio, quien considera este salón como el lugar perfecto para compartir la afición. 'La gente considera el cómic como algo para niños y cuando dices que eres aficionado la gente te mira raro. Pero hay historias de todo tipo y para todo el mundo', añade José Antonio, quien espera aprovechar al máximo los tres días que dura la cita.
Y como él e Irene, lo harán Marina López y Victoria Aranda, dos estudiantes de 17 y 15 años, respectivamente. Marina ha viajado a Jerez y Granada para visitar otros salones y ahora tiene la oportunidad de comprar las últimas novedades en su ciudad y poder ver las proyecciones más esperadas como el final de la serie Sakura y Cowboy Beebop. 'Te metes en la historia, los personajes son muy divertidos y me inspiran para dibujar', dice Marina.
Uno de sus trabajos forma parte de la exposición de dibujos que recoge creaciones de toda España. 'Siempre hay una serie que es la que te engancha y entonces comienzas a comprarte todo lo que se relaciona con ella. Yo soy feliz si puedo conseguir algo original de Japón aunque no sepas leerlo. Tengo libros de ilustraciones, cómic, figuras... es coleccionismo puro y duro', dice Marina. 'El manga es una forma de vida. Están los que viven en las películas, los que lo hacen en los libros y nosotras, que lo hacemos en los cómics. La verdad es que hay gente muy enganchada', dice Victoria. Pero no han sido sólo adolescentes los que se han visto atraídos por la intensa programación del salón. Antonio Mancero tiene 25 años y viene buscando cómics de Marvel. 'Siempre me han gustado este tipo de historias y quiero conseguir algo de Spiderman o La masa', dice Antonio.
De Superman a Akira
El II Salón del Cómic de Málaga reunirá hasta mañana domingo cientos de aficionados no sólo al manga, sino también a los cómics europeos y estadounidenses. Los superhéroes con poderes como Superman, Batman, Spiderman convivirán con Tintín, Mafalda y el guerrero Akira. Tiendas especializadas de toda Andalucía han montado una decena de puestos en los pasillos del Centro Cívico. En ellos se pueden encontrar las últimas novedades. También se pueden comprar muñecos, carteles, llaveros, camisetas... Y las salas, bautizadas particularmente para este evento con nombres como Battosai Sakura, Ikaro o Unicornio, acogen proyecciones de series, largometrajes y cortos de animación, conferencias y talleres de dibujo. También se celebran torneos de cartas pokémon, concursos de karaoke, de videojuegos o juegos de rol.
'El objetivo principal del Salón es dar a conocer este mundo para que las personas que piensan que los cómics, los videojuegos y el rol son para niños sepan que el lugar de donde provienen existen ejemplares para todas las edades y que hay muchos adultos que juegan y leen', afirma Francisco Javier Cerezo, uno de los organizadores del evento.
A una hora de la inauguración, el salón acogía ayer a más de 200 aficionados que intentaban hacerse un hueco entre tanta gente. 'Esperamos mantener este lleno durante todos los días. El problema es que siempre estamos faltos de espacio', afirma Álvaro Pérez, promotor del salón.
'No hay un perfil preestablecido para los lectores de cómics. Esto es para todo tipo de edades, de mentes y personas', dice Cerezo. 'Precisamente nuestra meta es quitar ese perfil y que todos se puedan sentir implicados en esto. Igual que con el fútbol disfrutan un niño, una mujer o una persona de 60 años, queremos que con el cómic ocurra lo mismo', añade.
Todos los viernes, decenas de aficionados malagueños se dan cita en una de las pocas tiendas especializadas de la capital. Allí comparten una afición que no siempre es comprendida por la mayoría. Durante estos días, se abre para ellos un foro donde sentirse a gusto sin tener que ser catalogados de raros o infantiles, inmersos en un mundo de imaginación y fantasía a todo color.
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