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Arto Lindsay | MÚSICA

'Hay que personalizar la tecnología'

Me gustan los discos en los que sientes que puedes vivir en su interior', afirma Arto Lindsay con la seguridad de un tímido profesor universitario exponiendo una nueva teoría tan personal como revolucionaria. En realidad, Arto Lindsay, por su apariencia y su forma comportarse, podría perfectamente pasar por profesor universitario, pero, en vez de lanzar al mundo teorías científicas (revolucionarias o no), prefiere llenarlo de música. Invoke, su nuevo trabajo, es un disco que podría gustar a Arto Lindsay. Sus climas cambiantes, cercanos, y su variedad de sensaciones, que pasan del ritmo a la caricia, incitan a cobijarse en su interior. Lindsay ha utilizado el inglés y el portugués para describir un puñado de sentimientos que viajan a ras de tierra. 'Me gusta cantar en inglés y en portugués, escribir en ambos idiomas y poder cambiar de uno a otro libremente', dice el compositor y cantante norteamericano.

'Lo que me fascina es intentar hacer temas suavecitos en inglés y buscar la equivalencia entre ritmo y melodía. En este momento tengo la necesidad de escribir cosas que se puedan cantar, tal vez por ello me he inclinado más por la melodía'. Estas palabras suenan a recapitulación en boca de un músico que en los años setenta atronó los escenarios con el apabulle sonoro de un grupo tan singular como DNA (y siguió después azotando gentiles en el seno de Lounge Lizards, Golden Palominos o sus ya más personales Ambitious Lovers).

'Siempre he estado buscado melodías, toda mi vida. Con DNA intentábamos expresar nuestras ideas de la forma más básica: el ritmo y la melodía estaban incluidos en un solo bloque sonoro. Estábamos muy ligados al momento que vivíamos y nuestro trabajo dependía del entorno. A pesar de ello hay un montón de bandas actuales que suenan como DNA y no me parece mal porque los más jóvenes desconocen una buena parte de la cultura pop. Estoy seguro de que si los adolescentes leyeran a William S. Burroughs o escucharan a los Beatles les parecía algo totalmente nuevo', afirma.

Arto Lindsay ha repetido en muchas ocasiones que la amplitud de miras de su música actual no es más que la lógica consecuencia de haber vivido su adolescencia en Brasil. 'En la década de los sesenta, la música pop brasileña era sumamente abierta: alegría y llanto al mismo tiempo. El sonido es allí muy importante: hasta los críos que tocan en la calle hacen cosas increíbles. Ya con DNA intentamos incluir ritmos brasileños tomados de la música de la gente del campo: ritmos atonales y progresivos sorprendentes'.

Después Lindsay se sumergió de lleno en esa música convirtiéndose en uno de los productores más interesantes del Brasil actual: Gal Costa, Carlinhos Brown, Vinicius Cantuaria, Marisa Monte e, incluso, Caetano Veloso le han confiado sus discos. 'Caetano es grande como músico y como productor. Muchos de sus discos han sido algo totalmente avanzado para su tiempo, recuerdo que cuando lo oí por primera vez fue un shock. Si yo hago las cosas como las hago es en buena parte gracias a la inspiración de Caetano'.

En los últimos años el trabajo de producción de Lindsay (no sólo con músicos brasileños ya que en su nómina figuran trabajos con Laurie Anderson, Ryuichi Sakamoto, David Byrne, Waldemar Bastos, Bill Frisell o los italianos Avion Travel) ha ido equiparándose a su trabajo como músico. 'Músico y productor: la misma persona pero en días diferentes', bromea. 'Producir me parece muy interesante y es bueno para mi ego trabajar con otra gente, siempre aprendo algo, pero no me interesan las producciones en plan industrial. Al trabajar en estudio lo que busco es el equilibrio entre lo acústico y lo electrónico, difícil porque cuando oyes la música en tu cabeza es una cosa, pero cuando la grabas es otra. La tecnología es buena, pero no como única cosa: los músicos deben ir personalizando la tecnología y, la verdad, no he encontrado últimamente muchas bandas que vayan transformado la tecnología en algo personal. Creo que ése es el mayor reto que tenemos por delante'.

El músico electrónico Arto Lindsay.
El músico electrónico Arto Lindsay.JOAN SÁNCHEZ

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