El Tribunal Superior valenciano reduce los servicios mínimos que decretó Zaplana

Los servicios mínimos fijados por la Generalitat Valenciana para la huelga general convocada hoy sufrieron ayer un recorte significativo en lo que afecta a la Administración autonómica y a la Administración de Justicia, la sanidad, la limpieza viaria y la empresa Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), aunque se mantienen en transportes y educación, que eran dos de los motivos principales de polémica, así como en algunos servicios sanitarios y asistenciales. Así lo establece un auto dictado ayer por la Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).

Después de suspender cautelarmente la orden el martes en respuesta a sendos recursos de CC OO y UGT, el tribunal escuchó ayer los argumentos de las partes y, pocas horas más tarde, emitió un auto que levanta parcialmente 'la medida cautelarísima de suspensión', lo que quiere decir que estima en parte los argumentos de las centrales sindicales, que consideraron abusivos los mínimos establecidos, y en parte los del gobierno que preside el popular Eduardo Zaplana, al mantener puntos importantes de la orden que habían sido impugnados.

Correciones

Las correcciones que los jueces aplican a la orden de la Generalitat afectan a la Administración autonómica, donde se reduce al encargado de registro la obligación de permanecer en su puesto frente a la pretensión del Gobierno valenciano de que fueran 'un funcionario o empleado público por cada uno de los servicios de registro, información, atención directa al público y atención telefónica'; a la Administración de Justicia, donde el TSJCV considera 'excesivos los servicios fijados, en ocasiones superiores a los funcionarios que operan los sábados'; en las consultas externas de hospitales,-que el tribunal reduce del 50% de la orden a un 25%-, en los centros de transfusiones, -que pasan del 100% al 50%-, y para los técnicos de salud laboral, cuyos mínimos suprime. También reduce el auto los servicios previstos en limpieza viaria y en la empresa pública Ràdio Televisió Valenciana (RTVV), donde el tribunal considera servicio mínimo 'la totalidad de los informativos' pero reduce los 320 empleados que pretendía la Generalitat a un 50% de la plantilla.

Los aspectos más importantes en que el tribunal da la razón al Ejecutivo de Zaplana son los transportes, cuyos servicios mínimos habían sido fuertemente criticados por los sindicatos, donde se mantiene el 10% del servicio en horas valle, así como en educación infantil, primaria y especial, donde se fija un profesor para cada ciclo formativo, y en los quirófanos programados, 'a favor de los pacientes que se encuentran en listas de espera'.

En su resolución el TSJCV lamenta que no exista un procedimiento específico para resolver los servicios mínimos similar al de manifestación, que establece preaviso y plazos.