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Pujol asegura que el Plan Hidrológico se aplicará aunque ganen los socialistas

Sin tregua. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, sigue sin poder visitar las tierras del Ebro con tranquilidad. Alrededor de 70 personas de la Plataforma en Defensa del Ebro se dieron cita ayer por la tarde en Móra d'Ebre para manifestar su disconformidad por el apoyo de CiU al Plan Hidrológico Nacional (PHN). En una reunión informal ante los empresarios (cuatro de ellos vieron vetada su presencia a la misma por llevar símbolos antitrasvase en su vestimenta), Pujol no se amilanó y, además de defender la necesidad de impulsar y presionar para la creación de parques eólicos, aseguró que gane quien gane las elecciones -en referencia a los socialistas catalanes-, el trasvase se llevará a cabo.

Pujol volvió ayer a oír los gritos de 'traidor' y 'queremos políticos dignos, no al trasvase', en la reunión que tenía previsto llevar a cabo ayer a las cinco de la tarde con empresarios de la Ribera d'Ebre en el local La Llanterna de Móra. Los ánimos entre los congregados allí para protestar ya se habían caldeado previamente con la denuncia de los cuatro empresarios que habían sido invitados al acto y cuya presencia fue vetada porque portaban símbolos antitrasvase en sus camisetas.

Los vetados tenían intenciones, según explicó uno de ellos, Ramon Roig, de mantener un diálogo con el presidente y entregarle un comunicado y material audiovisual. 'Nos han vetado porque llevábamos camisetas antitrasvase', explicó Roig. Una vez acabado el acto, los manifestantes mantuvieron forcejeos con agentes de los Mossos d'Esquadra, que les igualaban en número, para poder acercarse al coche oficial de Pujol e increparle. Los manifestantes no pudieron aproximarse, ante el despliegue policial, al local de La Llanterna para protestar.

El presidente, durante su alocución a los empresarios y tras afirmar que él no miente nunca, aseguró que gane quien gane las elecciones 'el trasvase se hará igual'. Asimismo, se refirió al mapa eólico y afirmó que 'no se puede admitir que no haya ninguno'.

Pujol, que recordó que no hay ningún país europeo que haya vetado la producción eléctrica eólica, se apoyó en un informe de Greenpeace en el que, en su opinión, se considera positiva la política medioambiental del Gobierno de la Generalitat e ironizó sobre las supuestas presiones que ejerce para la construcción de parques eólicos en las tierras del Ebro, al asegurar que las realiza no sólo para las de la zona, sino para el resto de Cataluña.

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