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La basura se acumula en las estaciones de metro tras el quinto día de huelga de los limpiadores

Los trabajadores volverán a reunirse hoy con la empresa para intentar un acuerdo

La huelga indefinida convocada desde el pasado lunes por los 400 trabajadores de la empresa Clece, una de las subcontratas encargadas de la limpieza del metro madrileño, ha dejado una larga estela de basura. En estaciones como Cuatro Caminos, la situación ha llegado a ser 'insoportable', según comentaban ayer algunos usuarios. Los empleados reclaman mejoras salariales y laborales, pero las reuniones que hasta ahora han mantenido con la empresa no han dado ningún resultado. Hoy está prevista una nueva cita, cuando la protesta llega ya a su sexta jornada.

'En los pasillos de la estación se mezclaba el olor de la basura acumulada con el de los orines. A medida que iba caminando tenía ganas de salirme del metro y coger un taxi porque no aguantaba más. Toda la gente iba con la mano puesta en la cara para poder soportar el hedor', comentó ayer una usuaria a la salida de la estación de Cuatro Caminos. Ésta era una de las estaciones más afectados por la huelga indefinida que desde el pasado lunes mantienen los trabajadores de la subcontrata Clece, siguiendo la convocatoria de los sindicatos CC OO, UGT, USO, CGT y SUT.

'Avenida de América también es un reguero de basura', declaró otra usuaria que transitaba por el intercambiador, uno de los más utilizados por los madrileños.

En estaciones como Plaza de Castilla, Príncipe Pío, Atocha Renfe, Banco de España, Tirso de Molina, Bilbao, Tribunal, Iglesia o Antón Martín también se notaban ayer las huellas de la huelga. Papeleras a rebosar, desechos en el suelo y hasta malos olores tenían que soportar los usuarios que se movían por esas zonas. En los accesos el panorama tampoco era agradable: bolsas, latas y colillas de cigarrillos formaban parte del escenario. '¡Vaya guarrería!', exclamó una joven que se disponía a entrar en la boca de metro de la estación de Tribunal.

Servicios mínimos

En otros puntos del suburbano, sin embargo, apenas eran palpables los estragos causados por cinco días sin limpiar. Los trabajadores aseguran que hasta ahora se han cumplido los servicios mínimos decretados por la compañía: un 36% en el turno de la mañana, otro 36% en el de la tarde y el 100% en el de la noche, aunque éste sólo cubre la limpieza de las taquillas de los vendedores, pero no la de los suelos ni de las papeleras. Mientras, las negociaciones entre los trabajadores y los representantes de la empresa siguen sin dar fruto. En la última reunión, que se produjo el pasado jueves, ambas partes se retiraron de la mesa de negociaciones con las manos vacías.

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Los empleados reclaman, entre otras cosas, un aumento salarial de 90 euros por trabajador y un plus del 20% de su sueldo (ganan 540 euros al mes) por la situación 'de penosidad y toxicidad' que dicen padecer en su día a día laboral. 'Nosotros estamos todo el tiempo en contacto con productos de limpieza que son tóxicos. Creemos que, tal como lo establece la Ley, deberíamos cobrar más por esta situación', señaló ayer Rosalía Rodríguez, una de las portavoces del comité de empresa. Durante la reunión con la compañía, según Rodríguez, aquella sólo ofreció un aumento salarial de 15 euros frente a los 90 que pedían los trabajadores y aseguró que la posibilidad de percibir un incremento salarial por razones de insalubridad y toxicidad había sido descartada. 'Lo que nos ofrecen es una ridiculez, es una miseria', aseguró Rodríguez.

Las otras reivindicaciones como, por ejemplo, que se vincule a la plantilla a los trabajadores que ahora son eventuales o que se asigne otro tipo de vestuario a los empleados no fueron, según Rodríguez, 'tenidas en cuenta por Clece'. Esta empresa ha declinado hacer cualquier comentario sobre la huelga. Los trabajadores denuncian que han detectado personal de otras contratas limpiando las estaciones y acusan a la compañía de 'boicotear' la huelga. 'Sabemos que había cuatro empleadas en la recién estrenada macroestación de Nuevos Ministerios. Algunas llevaban uniforme rojo y otras iban de calle. Esta situación la hemos trasladado al juzgado porque es absolutamente ilegal', declaró la portavoz del comité de empresa.

Pese al bloqueo en las negociaciones los empleados se muestran 'abiertos al diálogo'. Para hoy está prevista una nueva reunión.

La huelga afecta a siete líneas y a 117 de las 201 estaciones del metro. La Consejería de Urbanismo y Transporte sigue sin intervenir en el conflicto.

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