El Defensor del Pueblo denuncia las condiciones del Centro de Internamiento de Extranjeros de Valencia

El Centro de Internamiento de Extranjeros de Valencia, en el antiguo cuartel de Zapadores, presenta un estado de limpieza 'muy deficiente', con apenas espacios de esparcimiento o para familias con hijos menores, y acusa un insuficiente número de funcionarios para su cuidado, según desvela el informe del Defensor del Pueblo sobre el año 2001.

El informe, que ayer fue presentado en el Parlamento y que repasa la situación de los centros de Madrid, Barcelona, Murcia, Las Palmas, Fuerteventura y Valencia, concluye que éste último 'carece de las condiciones deseables para alojar a los extranjeros objeto de expulsión'.

Según precisa el informe, el centro de extranjeros de Valencia está ubicado 'en unos antiguos cuarteles policiales parcialmente rehabilitados', y su estado general de limpieza, especialmente en los baños, es 'muy deficiente'. Y añade: 'A los internos no se les suministra para su aseo personal más que jabón y toallas, que son lavadas una vez por semana. En caso de precisarlos, se pueden solicitar del personal que realiza los servicios de limpieza o de los funcionarios policiales que, en su caso, efectúan las gestiones mediante su compra en el exterior como un favor'.

Además, explica que en el centro sólo están habilitadas 'una sala de estar y un patio exterior' como zonas de esparcimiento para los extranjeros recluidos en él, con un mobiliario 'precario' y sin 'juegos de mesa o entretenimiento de ningún tipo'. De hecho, continúa, 'no existe en este centro ningún espacio destinado a familias con hijos menores y, según la información recabada, en las ocasiones en que se plantea tal situación, se procede a su alojamiento en las celdas de la zona de mujeres, separada de la zona de hombres por una reja metálica'.

Otro de los problemas que acusa el centro, según el informe del Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, es la 'insuficiencia de dotación de funcionarios' (un total de ocho distribuidos en tres turnos de ocho horas), para atender las 68 plazas con las que cuenta el centro, 'que suele estar al completo'. 'De acuerdo con la información recibida, esta previsión puede resultar escasa para la vigilancia de los internos', denuncia. También remarca la 'ausencia de un asistente social' en el recinto, así como la falta de 'convenios de colaboración con organizaciones no gubernamentales que pudieran suplir esta carencia'.

La diputada socialista Nuria Espí y el diputado de EU en las Cortes Valencianas Ramon Cardona se congratularon de que el Defensor del Pueblo haya tomado 'cartas en el asunto'.