Banco de Valencia, Facsa y Lubasa desplazan a las cajas en Aguas

El acuerdo alcanzado entre el Banco Santander y los accionistas de Aguas de Valencia en abril para ceder la titularidad del 21,97% de la concesionaria del servicio de agua potable en Valencia por 32,5 millones de euros a las dos principales cajas de ahorro de la Comunidad saltó por los aires a última hora. El Banco de Valencia, Facsa y Lubasa hicieron valer su derecho preferente de compra cuando la oferta fue efectiva y compraron, respectivamente, un 10,61, un 6,41 y un 4,94% del capital de Aguas. Una alta fuente del Consell atribuyó ayer la ruptura del acuerdo a Vicente Boluda, presidente de la empresa, sin mayores precisiones.

Aguas de Valencia acaba de renovar la concesión del servicio de agua potable en la ciudad de Valencia por 50 años. Es un negocio cautivo, pero no arroja grandes dividendos y tiene pocas posibilidades de expansión. El Banco Santander tenía previsto ceder su participación por razones estratégicas. Y alcanzó un acuerdo en abril para vender su participación a Bancaixa y la CAM, según confirmaron ayer fuentes del banco que cita Europa Press.

Tal acuerdo, avalado por la Generalitat, suponía la renuncia de los actuales accionistas a su derecho preferente de compra. Y saltó por los aires a última hora.

Una alta fuente del Consell atribuyó a Vicente Boluda, presidente de Aguas de Valencia y titular del 11,45% del capital, la ruptura del acuerdo a mediodía de ayer. Pero el desenlace final apunta a que los beneficiarios de la operación son Facsa y Lubasa, dos constructoras de Castellón, que amplían su presencia hasta un 11,23% y un 8,8% del capital, respectivamente.

Una alta fuente del Banco Valencia había desestimado la opción de compra alegando que el precio ofrecido por el Banco Santander era demasiado elevado. Pero finalmente, el banco valenciano, participado en un 38% por Bancaixa, adquirió ayer 208.283 acciones, que representan el 10,61% del capital social de Aguas de Valencia, según se comunicó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El coste de la adquisición supondrá al Banco de Valencia un desembolso de más de 15,7 millones de euros. Con esta compra el banco pasa a tener el 19,11% de la empresa hídrica valenciana.

El derecho preferente de compra ejercido por Facsa y Lubasa fue confirmado por fuentes del Banco Santander que cita Europa Press, pero no fue objeto de ningún comunicado de parte de la CNMV.

Los demás accionistas mantienen su participación. Boluda tiene un 11,45% y el Grupo francés Bouygues un 33%, el máximo pemitido en virtud de acuerdos internos y que cerraba cualquier opción de compra de la multinacional francesa.

Las mismas fuentes del Banco Santander indicaban que este reparto 'supone una alteración sobre el acuerdo' formalizado en abril, que preveía vender un 3% a Lubasa y otro tanto a Facsa, un 10,97% a Bancaixa y un 5% a la CAM. Una venta que, finalmente 'se ha modificado'. La operación accionarial respeta el pacto de accionistas suscrito en 2000, que recoge el derecho a tanteo y limita el capital al 33%, con penalizaciones en caso de incumplimiento. El supuesto acuerdo para dar entrada a Bancaixa y CAM en Aguas de Valencia podría haber sido objeto de sanciones de parte de la CNMV, que podría haberlo considerado una operación concertada. Algunas fuentes implicadas en la operación atribuyeron ayer a esa posibilidad la ruptura final.

Sin embargo, otras fuentes financieras sostienen que tal acuerdo nunca contó con el beneplácito de Facsa y Lubasa, porque sacrificaba sus posibilidades de ganar presencia en Aguas en favor de la CAM, que ni siquiera era accionista.

Tal versión apunta que el acuerdo fue avalado desde la Generalitat sin tener los cabos atados. Y sugiere que la supuesta oposición de Boluda en el último momento constituye un movimiento del presidente en favor de los dos accionistas de Castellón para blindar su posición.