_
_
_
_
Reportaje:

Un duro muy estoico

Cincuenta y seis millones de 'sénecas' pasaron de mano en mano para pequeñas transacciones cotidianas entre 1947 y 1972 Cincuenta y seis millones de 'sénecas' pasaron de mano en mano para pequeñas transacciones cotidianas entre 1947 y 1972Cincuenta y seis millones de 'sénecas' pasaron de mano en mano para pequeñas transacciones cotidianas entre 1947 y 1972

De todos los billetes históricos de los dos ciclos de El papel de la Peseta que EL PAÍS ha entregado gratis con cada ejemplar, quizá sea el de 5 pesetas que lleva fecha de 12 de abril de 1947, el que ofrezca una expresión con más fuerza (aparecerá el próximo miércoles).

Se trata del duro de Séneca, el célebre filósofo romano del estoicismo, nacido en Córdoba hace 2005 años, es decir, en el 3 antes de Cristo. Su ascético semblante aparece en el anverso del billete, haciendo gala de una mirada intensa, que da la perfecta apariencia estoica. También puede decirse que el billete tuvo una extensa vida estoica, pues estuvo en circulación durante un largo cuarto de siglo, desde que salió a la calle en 1947 hasta que se retiró en 1972. La fecha que aparece en el papel no suele coincidir con el periodo de circulación, ya que muchos se mantienen en reserva hasta el momento oportuno. En total pasaron de mano en mano 56 millones de ejemplares; por su pequeño valor y la escasez de metal en los años cuarenta se utilizó mucho en las pequeñas transacciones del día a día.

Del mismo periodo es el billete de 1.000 pesetas, que tiene fecha del 19 de febrero de 1946 (lunes). Se tiraron tres millones de ejemplares que circularon entre el 19 de octubre de 1948 hasta el año 1971. Se ilustró con la efigie del también filósofo Juan Luis Vives, nacido en Valencia en 1492 y fallecido en Brujas en 1540. El humanista tuvo una gran influencia en la corte inglesa del rey Eduardo VIII, de cuya primera esposa Catalina, hija de los Reyes Católicos, era lector y consejero. Este billete está dedicado a Valencia, puesto que además por el reverso tiene un grabado del claustro del Colegio del Patriarca.

Otro de 1.000 que se incluirá en el periódico del viernes 3 de mayo se fabricó en 1928; un total de dos millones de billetes se pusieron en circulación durante la guerra en la zona republicana. Tiene grabada la catedral de Sevilla y el rostro del rey Fernando III el Santo, que tomó la ciudad a los musulmanes en 1248. Por la otra cara aparece el cuadro de corte romántico del pintor madrileño Alejandro Ferrant (1843-1917), titulado Última comunión de San Fernando.

La entrega del jueves 15 serán los 50 escudos de 1873, que fue falsificado de forma muy amplia. Un escudo equivalía a un duro, es decir, cinco pesetas. Tanto fue así que en la Gaceta (el BOE de entonces) tuvo que aparecer una aclaración en la que se indicaba que el billete auténtico no llevaba una rayita debajo del cero en pequeño que indicaba la fecha (1º de mayo de 1973) de fabricación. ¡Mínimo detalle que los monederos falsos no supieron avizorar! Circularon 436.000 ejemplares de 1874 a 1878, ofrece poco colorido con un grabado alegórico de la industria y el comercio.

Esos mismos años estuvieron circulando los 96.500 billetes de 400 escudos que tenían la misma fecha de 1º de mayo que el anterior. Éste, por el contrario, no resultó fácil falsificar. Está ilustrado con un dibujo alegórico de las nueve musas. El reverso iba en blanco en Madrid y en provincias tenía un espacio para poner el nombre de la sucursal.

Viernes. 1.000 pesetas del 15 de agosto de 1928. Circularon durante la guerra civil por el territorio controlado por la República y, por tanto, prohibido en la otra zona. Fabricado en Londres por Bradbury, Wilkinson y Co. Precio actual: 15.000 pesetas.

Jueves. 50 escudos de 1873. Ofrece como curiosidad en el reverso un espacio en blanco para que las sucursales del Banco de España lo rellenaran con el nombre de la localidad. Fácil de falsificar. Se distinguía de los billetes buenos porque el cero pequeño de la fecha (1º de mayo) no estaba subrayado. El valor de un ejemplar nuevo oscila entre las 350.000 y las 400.000 pesetas.

Martes. 400 escudos de 1873. Fabricado en los talleres del Banco de España. El grabador fue Domingo Martínez. Es un billete sencillo en su concepción, en tonos suaves de verde y rosado amarillento. Actualmente un billete nuevo se cotiza a 350.000 pesetas.

Lunes. 1.000 pesetas de 1946. Realizado en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Los grabadores fueron José y Alfonso López Sánchez Toda. Incorporó por primera vez a la pasta de papel una hebra metálica como medida de seguridad. Valor actual: 100.000 pesetas.

Miércoles. 5 pesetas del 12 de abril de 1947. Llamado el séneca porque está ilustrado con la cara del filósofo. En el reverso tiene tres rosetones a torno geométrico que grabó José López Sánchez Toda. Al tirarse 57 millones de ejemplares, se encuentra con facilidad. Su precio está entre 300 y 700 pesetas.

Jueves. 50 escudos de 1873. Ofrece como curiosidad en el reverso un espacio en blanco para que las sucursales del Banco de España lo rellenaran con el nombre de la localidad. Fácil de falsificar. Se distinguía de los billetes buenos porque el cero pequeño de la fecha (1º de mayo) no estaba subrayado. El valor de un ejemplar nuevo oscila entre las 350.000 y las 400.000 pesetas.

Martes. 400 escudos de 1873. Fabricado en los talleres del Banco de España. El grabador fue Domingo Martínez. Es un billete sencillo en su concepción, en tonos suaves de verde y rosado amarillento. Actualmente un billete nuevo se cotiza a 350.000 pesetas.

Lunes. 1.000 pesetas de 1946. Realizado en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Los grabadores fueron José y Alfonso López Sánchez Toda. Incorporó por primera vez a la pasta de papel una hebra metálica como medida de seguridad. Valor actual: 100.000 pesetas.

Miércoles. 5 pesetas del 12 de abril de 1947. Llamado el séneca porque está ilustrado con la cara del filósofo. En el reverso tiene tres rosetones a torno geométrico que grabó José López Sánchez Toda. Al tirarse 57 millones de ejemplares, se encuentra con facilidad. Su precio está entre 300 y 700 pesetas.

De todos los billetes históricos de los dos ciclos de El papel de la Peseta que EL PAÍS ha entregado gratis con cada ejemplar, quizá sea el de 5 pesetas que lleva fecha de 12 de abril de 1947, el que ofrezca una expresión con más fuerza (aparecerá el próximo miércoles).

Se trata del duro de Séneca, el célebre filósofo romano del estoicismo, nacido en Córdoba hace 2005 años, es decir, en el 3 antes de Cristo. Su ascético semblante aparece en el anverso del billete, haciendo gala de una mirada intensa, que da la perfecta apariencia estoica. También puede decirse que el billete tuvo una extensa vida estoica, pues estuvo en circulación durante un largo cuarto de siglo, desde que salió a la calle en 1947 hasta que se retiró en 1972. La fecha que aparece en el papel no suele coincidir con el periodo de circulación, ya que muchos se mantienen en reserva hasta el momento oportuno. En total pasaron de mano en mano 56 millones de ejemplares; por su pequeño valor y la escasez de metal en los años cuarenta se utilizó mucho en las pequeñas transacciones del día a día.

Del mismo periodo es el billete de 1.000 pesetas, que tiene fecha del 19 de febrero de 1946 (lunes). Se tiraron tres millones de ejemplares que circularon entre el 19 de octubre de 1948 hasta el año 1971. Se ilustró con la efigie del también filósofo Juan Luis Vives, nacido en Valencia en 1492 y fallecido en Brujas en 1540. El humanista tuvo una gran influencia en la corte inglesa del rey Eduardo VIII, de cuya primera esposa Catalina, hija de los Reyes Católicos, era lector y consejero. Este billete está dedicado a Valencia, puesto que además por el reverso tiene un grabado del claustro del Colegio del Patriarca.

Otro de 1.000 que se incluirá en el periódico del viernes 3 de mayo se fabricó en 1928; un total de dos millones de billetes se pusieron en circulación durante la guerra en la zona republicana. Tiene grabada la catedral de Sevilla y el rostro del rey Fernando III el Santo, que tomó la ciudad a los musulmanes en 1248. Por la otra cara aparece el cuadro de corte romántico del pintor madrileño Alejandro Ferrant (1843-1917), titulado Última comunión de San Fernando.

La entrega del jueves 15 serán los 50 escudos de 1873, que fue falsificado de forma muy amplia. Un escudo equivalía a un duro, es decir, cinco pesetas. Tanto fue así que en la Gaceta (el BOE de entonces) tuvo que aparecer una aclaración en la que se indicaba que el billete auténtico no llevaba una rayita debajo del cero en pequeño que indicaba la fecha (1º de mayo de 1973) de fabricación. ¡Mínimo detalle que los monederos falsos no supieron avizorar! Circularon 436.000 ejemplares de 1874 a 1878, ofrece poco colorido con un grabado alegórico de la industria y el comercio.

Esos mismos años estuvieron circulando los 96.500 billetes de 400 escudos que tenían la misma fecha de 1º de mayo que el anterior. Éste, por el contrario, no resultó fácil falsificar. Está ilustrado con un dibujo alegórico de las nueve musas. El reverso iba en blanco en Madrid y en provincias tenía un espacio para poner el nombre de la sucursal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_