_
_
_
_
_
CARTAS AL DIRECTOR
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Telefónica

Quisiera denunciar un hecho que me viene sucediendo desde hace mucho tiempo. Resulta que soy una persona que, aunque parezca mentira, no dispone de un teléfono móvil. Ocasionalmente necesito hacer alguna que otra llamada telefónica cuando no me encuentro en casa. Cuando se da el caso, utilizo las cabinas públicas de Telefónica (todavía no entiendo por qué omiten el acento, siendo una palabra esdrújula, según creo). Con cierta frecuencia ocurre que no consigo contactar con la persona a la que intento localizar. Al estar su contestador automático desactivado, y no descolgarse el teléfono, no se realiza ninguna llamada. Entonces, cuelgo el teléfono esperando obtener los, como mínimo, 0,6 euros (antes 100 pesetas) a que se me obliga cuando deseo hacer una llamada a un teléfono móvil. Estupefacto (aunque cada vez menos, debido a la frecuencia), compruebo cómo la mayoría de las cabinas no devuelven absolutamente nada. El hecho de cobrar por un servicio que no se ofrece, ¿no es una injusticia? ¿Un fraude? ¿Una estafa? ¿O es simplemente un robo? ¿Hasta cuándo tenemos que estar sujetos a este tipo de abusos por parte de esta empresa? Nunca he sido partidario de las liberalizaciones. Pero en el caso de las compañías telefónicas españolas, deseo que lleguen pronto para no tener que estar vinculado jamás con Telefónica, a la que, por desgracia, pertenece el monopolio de las llamadas metropolitanas.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_