Sant Jordi marca el inicio de la temporada 'castellera'

La mayor parte de las colles castelleres han elegido la jornada de Sant Jordi y los fines de semana cercanos a la misma para llevar a las plazas las primeras construcciones del año. No es un fenómeno nuevo, aunque en este año parece acentuado. Las colles que levantan los castells de mayor dificultad ya han presentado sus credenciales erigiendo estructuras de ocho pisos en una temporada que, muy posiblemente, estará marcada por el concurso bianual casteller que se llevará a cabo el primer domingo de octubre.

Y es que una temporada castellera con concurso (que se celebra todos los años pares en la plaza de toros de Tarragona) se plantea siempre de otro modo. Las actuaciones más importantes de la temporada serán las que coincidan con las fiestas mayores de las localidades de la zona tradicional o que cuentan con las colles más importantes como Sant Joan, en Valls, el 24 de junio; Sant Pere, en Terrassa, el 29 del mismo mes, o las diades de La Bisbal, Arboç y Sant Felix en Vilafranca, en agosto.

Pero las colles con opción a imponerse (a excepción de los Minyons de Terrassa que renuncian a acudir al certamen por no estar de acuerdo con el carácter competitivo del mismo) o a obtener una buena clasificación planifican sus actuaciones durante todo el año para llegar a la cita en el mejor estado de forma posible. Acabado el concurso quedarán las actuaciones de Santa Ursula en Valls, en octubre; Tots Sants en Vilafranca el 1 de noviembre, y la jornada de los Minyons en Terrassa, también en noviembre, cuando las colles afrontan los últimos retos del año.

¿Qué grandes construcciones se verán esta temporada? ¿Se superarán los registros de la anterior? ¿Se levantará algún castell inédito? Son preguntas de difícil respuesta. La evolución en los últimos años de las cuatro agrupaciones que han estado por encima de las demás, la Colla Vella dels Xiquets de Valls, los Castellers de Vilafranca, la Colla Joves dels Xiquets de Valls y los Minyons de Terrassa, invita a pensar que la respuesta puede ser afirmativa en todos los casos. Por otro lado, si se suma la influencia del Concurso de Tarragona al hecho de que a las cuatro entidades les quedara algún reto pendiente la temporada pasada, es bastante factible que así sea.

También habrá que estar atentos a la evolución de las colles que están detrás. Así, los Castellers de Barcelona, la Colla Jove de Tarragona, los Bordegassos de Vilanova y los Xiquets de Tarragona que en los últimos años han ido levantando algún castell de nou, intentarán acortar la distancia que las separa de las cuatro grandes. Por último los aficionados esperan que los Capgrossos de Mataró den un paso más en su firme trayectoria y consigan convertirse también en colla de nou.

Muchos 'castells de vuit'

Si entre el fin de semana pasado y el día de Sant Jordi los Minyons de Terrassa, los Castellers de Vilafranca, la Colla Vella de Valls y la Jove de Tarragona levantaron las primeras construcciones de ocho pisos de la temporada, ayer fue el turno de los Bordegassos de Vilanova, la Colla Joves de Valls y nuevamente el de los Minyons. En la celebración del aniversario de la colla del Garraf, los Minyons descargaron el primer cinc de vuit del año además de la torre de vuit y el tres de vuit. Los Bordegassos levantaron sus primeros vuit del año con el tres, la torre y un trabajado quatre de vuit, mientras que los de Valls hiceron la actuación clásica de vuit con el tres y el quatre de vuit además de la torre de set.