Un trabajo por contacto personal

Ni los anuncios en prensa, ni Internet, ni la selección de currícula son el método favorito de los empresarios españoles cuando quieren cubrir un puesto de trabajo. Según el informe anual de la Encuesta de Coyuntura Laboral del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales correspondiente al año pasado, la forma más utilizada por éstos para encontrar candidatos es el recuso a los contactos personales, es decir, a la red de conocidos. El 21,3% de los empresarios utiliza esta vía.

La tendencia a buscar en el círculo de conocidos a los futuros empleados varía en función de los sectores de actividad: en construcción llega al 30,4%, mientras que en los servicios, el 20% recurre a esta práctica, exactamente el mismo porcentaje que utiliza los currícula que le han enviado. Pero también del tamaño de la empresa -más frecuente cuanto más pequeña es la sociedad-, la región -el 29% en el caso de los empresarios canarios-.

Internet ya es tan usado por las compañías para encontrar nuevos trabajadores como los anuncios en prensa, un 20,4% de los casos

La segunda vía más utilizada por los empresarios es la selección sobre los currícula que los trabajadores envían directamente a las compañías (20,4% de los casos).

Internet también se está abriendo paso como canal para la búsqueda de nuevos trabajadores. Junto a las oficinas de los servicios públicos de empleo y los anuncios publicados en la prensa se colocan en el segundo lugar. Estos tres métodos son utilizados por el 16,1% de los empresarios.

Frente a todos ellos, se encuentra la promoción interna (sólo recurren a ella el 10, 5% de los consultados), las empresas de selección de personal (5,6%), las de trabajo temporal (4,9%) y las bolsas de trabajo universitarias, de escuelas técnicas o formación profesional (5%).

Por último, los menos frecuentados son la promoción interna, 10,5%; las empresas de selección de personal, 5,6%; las de trabajo temporal, 4,9%, y las bolsas de trabajo universitarias, de escuelas técnicas o formación profesional, 5%.Estos datos se explican en parte por el gran peso que tienen las pequeñas y medianas empresas (pyme) en el tejido empresarial español.