La gestión de la ejecutiva de UGT recibe un apoyo casi unánime

El séptimo congreso de UGT que se clausura hoy se ha caracterizado durante estos días por la unanimidad casi absoluta. La gestión realizada durante los últimos cuatro años por los órganos del sindicato (la ejecutiva, el comité y la comisión de control) ha sido aprobada por el 99% de los delegados asistentes al cónclave. Está previsto que hoy se proclame la reelección de Manuel Pastrana como secretario general por cuatro años más, ya que no se ha presentado ninguna candidatura alternativa.

En la presentación del congreso, el pasado miércoles, Pastrana ya advirtió de que UGT llegaba a este encuentro con una gran 'cohesión interna y consenso' que se ha puesto de manifiesto estos días en la evaluación de la gestión que ha relizado la ejecutiva que lidera y en las comisiones de trabajo, que han aprobado sus conclusiones por unanimidad y sin apenas alegaciones.

El secretario general llegó a este congreso el primer día con la seguridad de que, dado el nivel de acuerdo existente, no se iban a presentar candidaturas alternativas que pudieran resultar vencedoras contra pronóstico, como ocurrió con la suya hace cuatro años. Pastrana recordó a los cerca de 400 delegados en la inauguración del congreso que tras su elección 'algunos se apresuraron a augurar un período de incertidumbre para la organización'. Para el dirigente, aquel resultado fue una 'apuesta de cambio, renovación e innovación' que ha convertido a UGT en una organización 'más grande, más moderna y más eficaz'.

La única disidencia de este congreso se ha limitado al voto negativo de tres delegados y la abstención de uno de ellos en la votación sobre la gestión de la ejecutiva, realizada última hora de la tarde del jueves. En el congreso han predominado, más que las crítica internas, las peticiones y reprimendas a los gobiernos, tanto el central como el autonómico, por su política laboral.