Universidades de la UE buscan en Córdoba mejorar el doctorado

El 8 de abril comienzó en Córdoba la cumbre universitaria europea que reúne en la ciudad a los máximos responsables de la Enseñanza Superior de los países de la Unión, más Noruega e Islandia. El objetivo de estos 70 especialistas es mejorar la calidad de los estudios de doctorado y hacerlos homologables en el marco de la UE en un plazo de unos dos años, insistiendo en facilitar la movilidad de alumnos y profesores.

El 8 de abril comenzó en Córdoba la cumbre universitaria europea que reúne en la ciudad a los máximos responsables de la Enseñanza Superior de los países de la Unión, más Noruega e Islandia. El objetivo de estos 70 especialistas es mejorar la calidad de los estudios de doctorado y hacerlos homologables en el marco de la UE en un plazo de unos dos años, insistiendo en facilitar la movilidad de alumnos y profesores.

Eugenio Domínguez, rector de la Universidad de Córdoba, adelantó ayer que las sesiones de trabajo tratarán fundamentalmente temas relacionados con el tercer ciclo, pero no excluirán otras cuestiones, como por ejemplo la Ley Orgánica de Universidades (LOU). Ya un día antes de la apertura oficial de la cumbre el director general de Universidades del Ministerio de Educación y Cultura, Ismael Crespo, aseguró a este respecto que la Ley Andaluza de Universidades no puede paliar los efectos negativos de la LOU 'porque ésta no tiene defectos'.

La Comisión Europea considera prioritario reforzar los estudios doctorales y crear una comunidad científica de alto nivel en el ámbito de la Unión. Estos dos elementos están íntimamente vinculados con la construcción del llamado 'espacio europeo del conocimiento', que, según se prevé, estará concluido antes de 2010. Pero podría ser mucho antes: a juicio de Ismael Crespo, la diferencia entre los doctorados de los distintos países de la Unión no es demasiado significativa, con lo que sólo harían falta unos ajustes, y el plazo de equiparación no debería prolongarse más de dos años, de modo que los estudiantes podrían iniciar los estudios de tercer ciclo en un país y realizar la tesis en otro. Esta movilidad se juzga como un claro indicador de calidad.

La idea que defienden los organizadores de la cumbre es que, al mejorar la formación de los doctores, el título cobrará peso y terminará adquiriendo un alto valor intrínseco y asociándose necesariamente a la excelencia investigadora. Así, será imprescindible para acceder a ciertos niveles de la administración pública y a algunos cargos privados.