La saga continúa

La ciudad alemana de Mannheim ha visto pasar en los últimos cuarenta años a lo más granado del baloncesto mundial. Desde 1958 se disputa el torneo Albert Schweitzer, señalado como un mundial oficioso en categoría júnior. En la edición de 2002, finalizada el pasado sábado, España consiguió la medalla de plata tras caer en la final ante Grecia. Se trata de la generación del 84, jugadores entre 17 y 18 años, dirigida por Carlos Sergio y que ha completado una magnífico papel tras vencer a selecciones como Yugoslavia, Lituania o Estados Unidos. Sergio ha sido durante varios años ayudante de Charly Sainz de Aja y tras la marcha de éste al baloncesto ACB, se hizo cargo del equipo.

Un equipo en el que ha destacado el jugador del Forum Valladolid, Fernando San Emeterio, el único con experiencia en la ACB. Un todoterreno que puede jugar hasta en tres posiciones y que realizó un extraordinario partido en la semifinal ante Estados Unidos al lograr 38 puntos y 15 rebotes. También ha tenido buenas actuaciones, sobre todo en el primer tramo de la competición, Jan Fernando Martín, hijo del fallecido pívot del Real Madrid y que fue subcampeón de este torneo en 1979. Junto a ellos Josep Ortega y José María Guzmán de la cantera de Badalona o los gemelos Urtasun del Proyecto Siglo XXI son los nombres destacados de esta generación.

Este proyecto, auspiciado por la Federación española cuenta con dos centros, uno masculino en el País Vasco y otro femenino en Cataluña. En los campeonatos de España y ligas autonómicas se reclutan los jugadores entre 14 y 18 años más interesantes. A partir de ese momento se trabaja a diario en tres aspectos: el físico, el técnico y el intelectual. Así se busca una formación integral del deportista. Los resultados no pueden ser más impactantes. En un torneo celebrado en Menorca, el equipo masculino, liderado por los gemelos Urtasun, vencieron a Barcelona y Real Madrid por 40 puntos y al Kinder de Bolonia, por 39. Ya hay jugadores formados bajo la tutela de este programa que han dado el salto a la ACB, como Fran Vázquez y Jon Cortabarría en el Unicaja.

Hace cuatro años, una canasta de Carlos Cabezas en la final ante Australia del torneo de Mannheim dio a España su primer título. En ese partido Pau Gasol logró cinco triples y muchos de los técnicos presentes en la ciudad alemana, le asemejaron a Tony Kukoc. Era el aviso para navegantes de un equipo que un año después se proclamaría campeón del mundo en Lisboa. Ahí estaban también Raúl López, Navarro o José Manuel Calderón que ya miran de reojo a la NBA. ¿Será capaz esta generación de emular a sus mayores?