Compás de espera
La última sesión de la semana en la bolsa española finalizó en un ambiente muy tranquilo. Las cortas diferencias en los precios marcaron la pauta a lo largo de todo el día lo que llevó al índice general de la Bolsa de Madrid a concluir con una mínima subida del 0,06%, en la semana perdió un 0,68%. El Ibex 35 recuperó un 0,07%, en cuatro días retrocedió un 0,96 %, y perdió el nivel de los 8.200 puntos.
Los inversores han optado por esperar nuevas noticias antes de volver a tomar posiciones y muy especialmente con la atención puesta en lo que ocurra en la crisis de Oriente Próximo. El precio del petróleo se redujo respecto a los últimos días, poco más de 27 dólares, lo que permitió al menos que las bolsas no perdieran terreno.
En los próximos días se comenzarán a publicar los primeros resultados de empresas en Estados Unidos y también habrá que estar pendiente de los indicadores económicos para determinar la marcha de la economía. El dato de desempleo correspondiente al mes de marzo en EE UU subió dos décimas, al 5,7%, aunque los mercados lo pasaron por alto. Dudas en el corto plazo que provocan jornadas de volatilidad en todas las plazas y sin que los analistas esperen al menos de momento grandes cambios.
Uno de los valores más castigados en la renta variable fue BBVA que perdió un 1,75%, debido a la investigación abierta por parte del Banco de España sobre las cuentas secretas de la entidad de crédito. La agencia Standard & Poors recortó la calificación del BBVA de estable a negativa lo que también animó a las ventas.
El volumen de negocio en el mercado continuo fue el más bajo de la semana con 1.918 millones de euros. En divisas, la moneda única perdió terreno con un cambio medio en 0,8786 dólares. La rentabilidad de la deuda finalizó en el 5,30% y se aleja de los niveles máximos.
