El profesor tranquilo
Es el primer afiliado de la Unión General de Trabajadores del País Valenciano que ha decidido lanzar un pulso oficialmente al que es desde hace 14 años secretario general de este sindicato. Y cuando explica su decisión lo hace desglosando sus propuestas como si de una más de sus clases se tratara. Didáctico por vocación y tradición familiar- es profesor de Geografía e Historia en el Complejo Educativo de secundaria de Cheste- en estos últimos meses no habla tanto del pasado como del futuro. Castillo pretende celebrar su cincuenta y un cumpleaños, el próximo mes de abril, como rutilante secretario general de UGT-PV. Cree que el actual responsable del sindicato ya ha soplado demasiadas velas en ese cargo.
Nació en Almería. Está casado y tiene dos hijos. Su ficha técnica más elemental también explica que se licenció en en Geografía e Historia en la Universidad de Granada y que es afiliado de UGT desde 1979. Hasta sus aficiones a la lectura, el paseo y la tertulia subrayan el talante tranquilo que rezuma.
El pasado mes de diciembre presentó públicamente su candidatura. Y para argumentarla frente a un rival de tanto fuste como Rafael Recuenco asegura que representa la necesidad de introducir un cambio 'que renueve ideas, personas y medios' dentro de UGT.
El punto de inflexión en la biografía sindical de Castillo fue su nombramiento como secretario general de la Federación de Enseñanza. Fue en 1992. Desde entonces ha sido reelegido en dos ocasiones para el cargo, en 1995 y en 1998. El trabajo realizado en esta federación y el respaldo de sus compañeros le animan a solicitar plaza de capitán en el buque sindical.
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