Capullo

No te dejes globalizar, junior. Reafirma tu individualidad, resalta tu arrolladora personalidad, rechaza la predestinación, señala libremente tu camino, marca tus propias tendencias eligiendo este turbodiesel que sólo cuesta 30.000 ' pavos', y reconduce aquel otrora deleznable aspecto aspirando al máximo canon de belleza. Mírate en el anuncio, que tan bien refleja tu pasado: semejante menda, con más granos que una paella gigante, eras tú hace cinco años, presa de insuperable apocamiento, tan triste, en plena tormenta hormonal. O hace cuatro: vaya pintas, con la floreada y hortera camisa. No veas lo bien que te recuerda esta galería de retratos cómo de chungo anduviste, sin levantar cabeza durante un lustro, porque ¿cómo ibas a ser (o estar) fashion si ni siquiera disponías de un móvil que se adaptara a ti, que te distinguiera como mereces? Menos mal que...!tatachín!, se hizo el milagro, y hete aquí la crisálida, emergiendo el rostro apuesto, ario y sonriente en que se ha trasmutado aquel miserable gusano. A ver si te enteras, criatura: el consumo hace aflorar lo mejor que hay en uno, y si te quedas bizco como ese otro pringao de la derecha de la página 14, en lugar de asemejarte a esa ricura engominada que le acompaña, será porque no disfrutas de nuestra ADSL 512Kbps y 2Mbps, que permite navegar y hablar a la vez sin filtros ni limitaciones.

Tú eliges. Pero sepas que el gasto te redimirá, te metamorfoseará. Fúndete los ingresos de casa. No saben tus 'viejos' la suerte que tienen con la tarifa plana y con esa forma tuya tan considerada de darles un euro antes de fumigarlos para que no se les ocurra usar el teléfono, ni el sofá, ni la mesita del centro durante al menos una hora y media.

No querrás ni acordarte, pero antes de seguir nuestros consejos sólo eras uno más, una larva blandengue, una oruga... como mucho, un insecto. Ahora, sin embargo, ya puedes proclamar bien alto que has sabido hallar en ti al perfecto capullo. Qué mejor detalle para el Día del Padre.