ERC busca ampliar el acuerdo sobre el autogobierno incorporando a CiU

'Estábamos pagando una factura demasiado alta en imagen', dijo ayer un diputado de Esquerra Republicana (ERC) para explicar el abandono, decidido el pasado miércoles, del compromiso de actuación conjunta con el Partit dels Socialistes (PSC) e Iniciativa Verds (ICV) en materia de autogobierno. El portavoz del partido, Joan Ridao, explicó que a partir de ahora buscará 'un acuerdo lo más amplio posible' en esta materia. Es decir, un acuerdo también con Convergència i Unió (CiU)~, aunque sin renunciar en absoluto, precisó, al documento conjunto suscrito en noviembre por el PSC-Ciutadans pel Canvi, ERC e ICV.

En el seno de la dirección republicana había crecido en las últimas semanas la convicción de que el PSC intentaba 'asimilarles' a partir de la firma del documento sobre el autogobierno. El grupo parlamentario decidió el pasado día 13 que había que cortar esta situación y marcar de nuevos las distancias con los socialistas. Eso hizo el secretario general, Josep Lluís Carod, cuando anunció que ERC 'recuperaba la libertad de maniobra' que había 'congelado' en aras del acuerdo tripartito de la izquierda.

A crear la sensación de dependencia respecto a los socialistas han contribuido varios hechos. El primero en el tiempo fue el 'recorte' impuesto por José Borrell al borrador del documento sobre autogobierno, que afectó a las pretensiones sobre la representación de Cataluña en los organismos de la Unión Europea; el segundo fue la crisis provocada en el grupo parlamentario de la Entesa Catalana de Progrés cuando los socialistas decidieron, sin consultar ni avisar a ERC, que apoyara a Borrell como representante del Parlamento español en la Convención sobre la reforma institucional de Europa. El tercer elemento han sido varias votaciones en el Congreso de los Diputados y el Parlament en las que el PSC y ERC han mantenido posiciones distintas pese a que afectaban a cuestiones del autogobierno.

La presentación por el Gobierno catalán, hace 10 días, de una propuesta sobre la mejora del autogobierno que tiene muchos puntos de coincidencia con las posiciones de ERC, y también con el documento tripartito de la izquierda, aumentó la inquietud de los dirigentes republicanos. Éstos entendieron que no podían enfrentarse a las posiciones de CiU, y decidieron situarse en la equidistancia entre ambas partes, con la pretensión de actuar como bisagra entre ambos.

La tapadera

Todo esto implica el abandono de un calendario establecido en las últimas semanas conjuntamente por los portavoces del PSC, ERC e ICV en la comisión de autogobierno, los diputados Josep Maria Vallès, Joan Ridao y Rafael Ribó, respectivamente, para forzar en el Parlament votaciones sobre aspectos concretos del documento tripartito acerca del autogobierno. Descolgada ERC de este calendario, Ridao pretende conseguir un 'acuerdo amplio' que permita a los republicanos votar tanto con la izquierda como junto a CiU.

El secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, aseguró ayer que elabandono de la estrategia conjunta con la izquierda por parte de ERC es 'el reconocimiento del fracaso de su planteamiento' y ofrece 'mayor valor político al documento del Gobierno de la Generalitat'. En declaraciones a TV-3, Duran aseguró que la federación nacionalista está 'abierta a dialogar con todo el mundo sin exclusiones para mejorar el autogobierno del país' y reiteró: 'Sólo hay dos límites; no podemos renunciar a lo que creemos sustancial y no queremos hacer lo que ha hecho ERC: de tapadera de las insuficiencias del PSC', un partido que 'no tiene soberanía para tomar decisiones sobre ésta y otras cuestiones'.