Ambiente de bar

David y José Muñoz pusieron en práctica una buena idea: recrear en directo el ambiente cercano y cálido de un bar y tocar en una clave más acústica, aunque sin renunciar al sonido de la guitarra eléctrica, para la que en este tramo de la andadura del grupo se ha confiado en la pericia del veterano José A. Romero. El dúo de Cornellá y su banda actuaron sentados en hilera junto a mesitas con mantel a cuadros, con platos de lonchitas de jamón y botellas de vino. De ahí que la audiencia fuera la que cabe en un teatro y se buscase lo recoleto de las candilejas para lograr el teatral efecto deseado.

En cuanto a lo musical, el sonido tuvo mejores momentos que otros, aunque la banda se sacó la espina del regular sonido de su última y multitudinaria presentación en Madrid, en La Riviera. En cuanto al repertorio, se componía una revisión ligera de las canciones de sus dos archiconocidos álbumes, aunque dándole más preeminencia al segundo, Destrangis. A resaltar la excelente interpretación del guitarrista Juan Maya, esta vez como cantante solista de un bonito tema, y la invitación a Joaquín Sabina y Pancho Varona a sumarse a la fiesta para interpretar juntos ante el delirio colectivo el 19 días y 500 noches del de Úbeda. Como curiosidad, la edad de gran parte de los asistentes: era curioso ver juntos a padres e hijos -muy pequeños: de menos de diez años- cantando: 'Voy a plantar un inmenso jardín de marihuana de la buena...'.