_
_
_
_

La Diputación vizcaína sacará a subasta en abril el parque de atracciones de Artxanda

La Diputación de Vizcaya pretende sacar a subasta en abril los terrenos del viejo parque de atracciones de Artxanda, en desuso desde hace 12 años.

La institución foral ha visto demorada la puesta en venta de este área de 10 hectáreas de superficie, que estaba prevista a finales del pasado año, por problemas surgidos en la definición de sus límites. La intención de la Diputación es pedir 2,4 millones de euros (400 millones de pesetas) por unos terrenos cuyo mantenimiento le cuesta a las arcas forales más de 120.000 euros anuales.

El parque de atracciones de Artxanda empezó a funcionar en 1974 pero en la siguiente década empezaron los problemas económicos, que obligaron a los socios -una empresa privada (44%), la Diputación (33%) y las las entonces cajas de ahorro de Vizcaya y de Bilbao (22%)- a abordar sucesivas ampliaciones de capital para mantener el complejo de ocio.

El parque ofrecía un circuito de karts, una noria, un auditorio y una piscina, y en su primera temporada llegó a lograr 450.000 visitantes. Esta cifra quedaba lejos del millón de usuarios fijado para que fuera viable, por lo que en 1988, cuando la afluencia había caído a 120.000 usuarios, entró en una delicada situación financiera en 1988 y obligó a la Diputación a tomar el control de la empresa concesionaria, Parque de Atracciones de Bizkaia. Se habilitaron nuevas instalaciones, aumentó la publicidad del parque y se proporcionó transporte gratuito. Se gastó en ello 586 millones de pesetas pero persistió un déficit de casi 200, por lo que en 1990 llegó el cierre definitivo del complejo. El fracaso se atribuyó a las malas comunicaciones con el recinto y las obsoletas atracciones.

En 1991 la Diputación barajó la renovación del parque para habilitar un gran complejo de ocio, en la línea de las instalaciones que empezaban a tener gran aceptación en España y otros países. Pero la gran inversión requerida frustró este plan y las principales atracciones se vendieron por poco más de 50 millones de pesetas. Sólo quedaron la piscina, las pirámides (símbolo del complejo) un destartalado circuito de karts y algunos pocos servicios.

Estas instalaciones no salen gratis, puesto que el mantenimiento y la vigilancia cuesta cada año 120.000 euros. Para evitar esta sangría económica, la Diputación decidió el pasado verano sacar a subasta los terrenos. Su intención era que el suelo, de 10 hectáreas de superficie, saliera a la venta a finales del pasado año. Entonces había algunos empresarios que mostraron su interés en la operación, pero tuvo que demorarse 'por un problema de invasión de los límites del municipio de Galdakao', según ha explicado un portavoz foral. 'Está ya en vías de solución y se espera resolverlo a lo largo de este mes', añadió.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La previsión es que los terrenos se saquen a subasta pública en abril. Pero la Diputación no descarta tampoco que nadie se presenta a la puja. 'Igual sucede que los que estaban interesados hace unos meses, ahora no lo estén'. En una zona cercana, entre Galdakao y Larrabetzu, también en pleno monte, existe ya un proyecto en marcha: una empresa construirá un campo de golf para finales del próximo año, con una inversión de 17 millones de euros (2.830 millones de pesetas). Ocupará una superficie de 70 hectáreas y prevé la admisión de 2.500 socios, que pagarán 12.000 euros por acción.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_