_
_
_
_
Reportaje:FIN DE SEMANA

Frescor en la sierra de Castellón

Segorbe atrae las miradas a la comarca del Alto Palancia

Retablos renacentistas, frescos, ricas casullas, aparatosas custodias, estatuillas de vírgenes que son leyenda para los paisanos de la comarca o importantes documentos como los de la batalla del Puig o el Compromiso de Caspe. La exposición La luz de las imágenes, de la catedral de Segorbe, ha sacado literalmente a la luz los eslabones de la historia de la diócesis de Albarracín-Segorbe, creada en el siglo XIII, algunos de ellos deteriorados, ocultos por el polvo o dados por desaparecidos hasta ahora.

Es la segunda vez que la Fundación La Luz de las Imágenes de la Generalitat valenciana organiza una exposición de estas características -la primera fue en la catedral de Valencia-. En esta ocasión han elegido Segorbe, población principal de la comarca del Alto Palancia, en Castellón, de unos 8.000 habitantes, y se prevé que la próxima sea Orihuela.

En esta exposición, los espacios arquitectónicos se convierten en museos: la catedral reúne obras y objetos de los siglos XIV a XVI y XIX; la iglesia de San Joaquín y Santa Ana, del siglo XVIII, y la de San Martín, del XVII. Dos años ha durado la recuperación de las piezas y su restauración. La búsqueda del rompecabezas histórico se realizó en los pueblos de la comarca del Alto Palancia pertenecientes a la diócesis y en los de otras provincias que por distintos motivos se relacionaron con ella.

Los hallazgos surgieron en los lugares más inverosímiles: tras unas tablas que se usaban como taburete, ocultas bajo otra pintura o almacenadas en el propio museo catedralicio. Sin ir más lejos, la pieza estrella de la exposición, el retablo del altar mayor de la catedral de Segorbe, obra que pintó Vicente Macip en el siglo XVI, nadie la había contemplado en su conjunto desde que se desmontó en 1791. La muestra ha tenido tanto éxito que la han prorrogado hasta el 26 de mayo.

La comarca del Alto Palancia ofrece otros aspectos menos piadosos, pero de gran interés. El mismo Segorbe tiene un casco viejo de callejuelas empinadas que se recorre en parte al ver la exposición con paradas en los puestos de artesanía y productos autóctonos (aceite, miel, dulces), y los más de 20 pueblecitos de la comarca del Alto Palancia son lugares muy apreciados para el veraneo. Además de su patrimonio histórico, que se remonta a los árabes, hay bonitos paseos entre calles estrechas y frescas, agua buena y abundante, comida consistente, gente amable y el bello paraje de los parques naturales de la sierra de Espadán y Calderona.

El valle del río Palancia, en su primer tramo hasta Viver, congrega la mayor parte de estas poblaciones. Al sur de la comarca destaca Sot de Ferrer, donde el ascenso al calvario, que fue costeado a principios del siglo XIX por los habitantes del pueblo, ofrece una preciosa vista de la zona. Ascendiendo por el valle, Navajas y sus fuentes mineromedicinales ya atraían a los veraneantes hace dos siglos. Quedan sus villas decimonónicas a la entrada de la población.

Boletín

Las mejores recomendaciones para viajar, cada semana en tu bandeja de entrada
RECÍBELAS

Conforme subimos en altura y el aire se vuelve más fresco, los campos de naranjos y otros frutales de Segorbe se van transformando en almendros, matorral bajo y bosque mediterráneo de pinos. Junto a Viver, Jérica, muy frecuentada últimamente por el turismo, conserva la torre de la Alcudia, levantada en el siglo XVII sobre un primer cuerpo de origen romano.

Alcornocales

El norte y el este del valle lo dominan ya las sierras de Espina y el parque natural de la sierra de Espadán con sus alcornocales. Allí, en plena sierra, se ubica Algimia de Almonacid, donde se puede visitar el Alto de la Nevera, un antiguo pozo para guardar la nieve que estuvo en uso hasta el siglo XIX, y más arriba, en Pavías, el pueblo más alto de la sierra de Espadán, se puede practicar la espeleología en la cueva Moma.

Y al sur y al oeste del Palancia, la Calderona y las sierras de Toro con Bejís, el pueblo de las fuentes y los manantiales, y El Toro, con sus calles con portales y fachadas medievales.

Altura merece una mención aparte. Allí se encuentran las ruinas de la cartuja de Vall de Crist, un importantísimo centro religioso y político en su época, que atesoró desde su fundación, en 1383, valiosas obras de arte. Durante la Desamortización la compró un constructor que la vendió por partes. Por toda la comarca hay diseminados pedazos de muro de la vieja cartuja, sus puertas y escaleras. Una de las puertas de la catedral de Segorbe pertenece a este edificio.

En Altura destaca el santuario de la Cueva Santa. La sala de los exvotos encierra un espectáculo algo morboso que hará las delicias de los antropólogos: la costumbre de fabricar una copia en cera de la parte del cuerpo enferma para que se cure. Amarillentos corazones, cabezas, manos, pies y otros objetos increíbles cuelgan de las paredes de esta sala. Al final de la húmeda cueva, iluminada por las velas de los fieles, hay una hermosa capilla.

GUÍA PRÁCTICA

Dormir

- Hospedería Tasca El Palén (964 71 07 40). Franco Ricart, 9. Segorbe. La habitación doble, 48 euros.

Comer

- Asador Bernini (964 71 34 16). Obispo Canubio, 17. Segorbe. Carnes a la brasa y embutidos. 21 euros. - Segóbriga (964 71 19 42). General Calvo Lucía, 1. Segorbe. Olla de la zona, tapas y carnes. 18 euros. - Thalassa (964 14 12 58). Cazadores, 3. Viver (Castellón). Unos 35 euros.

Exposición y excursiones

- Fundación Luz de las Imágenes (www.laluzdelasimagenes.com y 963 34 60 49). Entradas (3 euros; 2,10 jóvenes, estudiantes y jubilados) en Servientrada (963 99 50 15) y en El Corte Inglés. Horario: de 10.00 a 20.00. - Un sendero GR-10 recorre las montañas Calderona-Sierra de El Toro, y existen nueve rutas para bicicletas

.Información

- Oficina de Turismo de Castellón (964 35 98 83). - www.castellon.costaazahar.com.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_