_
_
_
_

El acusado de matar a Mar Herrero se calificó de 'salvaje' tras entregarse

Andrés asestó a la víctima cinco puñaladas

Mábel Galaz

Las cinco puñaladas que recibió Mar Herrero el 13 de octubre de 1999 fueron mortales. Lo explicaron ayer en la Audiencia Provincial los dos forenses que examinaron su cadáver, y que agregaron que la fallecida presentaba signos de asfixia. Una trabajadora social y una psicóloga que también testificaron en el juicio contra el ex novio de la joven, Luis Patricio Andrés, recordaron cómo éste les confesó el crimen: 'He actuado como un salvaje', les dijo.

Los dos forenses que examinaron el cadáver de Mar Herrero detallaron ayer en el juicio, durante casi una hora, las lesiones que la joven de 23 años presentaba tras su muerte. A la explicación asistió con gesto impasible Luis Patricio Andrés, el asesino confeso (aunque en la primera sesión del juicio se retractó de su confesión inicial y declaró su inocencia), que escuchó cómo los expertos describían las heridas. De vez en cuando, Luis Patricio, de 38 años, levantaba la mirada para observar, sin pestañear, las fotos en las que aparecía su ex novia amordazada y herida de muerte.

'Tenía el pulmón destrozado. Las cinco lesiones que presentaba en el tórax eran mortales', indicó uno de los forenses. 'El autor del asesinato se ensañó con la víctima, dada la reiteración de las heridas de arma blanca que presentaba', añadió. Una de las puñaladas tenía una trayectoria de 11 centímetros de largo y dos de ancho que le rompió hasta un hueso.

Una trabajadora social y una psicóloga de los juzgados de plaza de Castilla testificaron también ayer. Su testimonio fue especialmente duro, ya que ambas fueron testigos preferentes, tanto de los días de angustia que pasó Mar Herrero antes de ser asesinada, como de la confesión de Luis Patricio. A ellas les explicó lo que había hecho tras entregarse en un juzgado de Vigilancia Penitenciaria, según declararon las mujeres.

'Insistió en decirnos que era el único culpable', afirmaron. 'Nos contó que no se iba a declarar culpable ante el juez, que sólo nos lo iba a contar a nosotras. Nos dijo que había usado a otras personas para poder llegar a Mar, pero que ellas eran inocentes. Explicó que se había comportado como un monstruo y que era consciente de lo que había hecho. Nos dijo: 'He actuado como un salvaje', concluyó la trabajadora social.

La psicóloga recordó que el acusado se encontraba en libertad condicional cuando ocurrieron los hechos, tras ser condenado a 18 años de cárcel por intentar matar a su anterior novia. Según contó esta testigo, conoció al procesado en marzo de 1999, y en julio del mismo año lo volvió a ver al acudir a ella en compañía de Mar Herrero a pedir permiso para poder ir a pasar unos días a Guardamar del Segura (Alicante). 'El siguiente contacto con él fue a finales de septiembre: el juez nos encargó que realizáramos un informe tras las denuncias que Mar había presentado contra él por amenazas', señaló.

El 8 de octubre, cuando la psicóloga y la trabajadora social estaban realizando el informe, Herrero acudió a ellas en busca de ayuda. 'Mar nos llamó y nos dijo que Luis Patricio había vuelto a amenazarla por teléfono y que la perseguía', explicaron.

'Alto riesgo'

'Nos contó, por ejemplo', señaló la trabajadora social, 'cómo un día la esperó a la salida del hospital en el que estaba ingresada su madre y, cuando iba en su coche, él se puso delante y empezó a gritarle'. Ambas profesionales elaboraron un informe para el juez y consideraron que esto suponía 'una situación de alto riesgo'.

Según el relato del fiscal, que pide 18 años de cárcel para el acusado, Mar y Luis Patricio comenzaron a salir en marzo de 1999 hasta el verano de ese año, cuando la joven decidió finalizar la relación, lo que 'no fue aceptado por éste'. Con la excusa de realizar un trabajo como maquilladora, Mar fue citada a las seis de la mañana en la plaza de Castilla, donde el que había sido su novio la obligó, a punta de navaja, a subir a una furgoneta que había alquilado. Andrés trasladó a la joven hasta la calle Albaida (San Blas), y una vez allí, señala el fiscal, amordazó a Mar y la ató de pies y manos; después le propinó cinco puñaladas. Las ataduras, según los forenses, las realizó con cuerdas de escalada, las mordazas con cintas aislantes y las puñaladas con un arma blanca de 11 centímetros de longitud y dos de ancho.

Un psiquiatra que también declaró ayer en la Audiencia explicó que Luis Patricio padece un trastorno de personalidad con rasgos psicopáticos, 'pues es impulsivo y narcisista'. 'Estaría mejor en un centro en régimen cerrado', apostilló. Además, consideró que el acusado tiene un orgullo desmedido y 'es una persona muy inteligente que comprende lo ilícito'. En cambio, el forense que atendió a Andrés en el juzgado, tras entregarse éste y confesar su crimen, señaló que no encontró en él 'ningún trastorno psicopatológico'.

María de las Nieves Fernández, abogada de Luis Patricio Andrés, intenta demostrar que sufre problemas psicológicos. Pero, además de los testimonios en contra de varios de los especialistas que ayer declararon, hay una sentencia de diciembre de 2001 -cuando Mar Herrero ya llevaba muerta más de un año- en la que se condena al que fue su novio a dos años de cárcel por amenazas a esta misma joven.La sentencia establece que el condenado no sufre ningún trastorno mental.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Mábel Galaz
Fue la primera mujer en pertenecer a la sección de Deportes de EL PAÍS. Luego hizo información de Madrid y Cultura. Impulsó la creación de las páginas de Gente y Estilo. Ha colaborado con varias cadenas de televisión y con la Cadena Ser. Ahora escribe en El País Semanal.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_