Basta

Ha llegado el momento de decir ¡basta!, ya está bien de reír las gracias a estos personajes que dicen ser vecinos de Puebla, y que desaparecen y aparecen del pueblo cuando les conviene, como el Guadiana lo hace en su recorrido al mar. Son personajes guiados a impulsos y que con artimañas y malas artes intentan defender lo indefendible basándose en ideales utópicos, antiprogresistas y antidemócratas. Estos dos 'personajillos', porque en realidad son dos, aunque por todos los sitios donde van se hacen llamar Colectivo de Vecinos de Puebla de la Sierra, dudo mucho de que el presidente de tal asociación esté al tanto de la mayoría de sus actuaciones, y creo que debería informarse de cuándo, cómo, de qué manera estos dos están utilizando su nombre y el de los demás socios denunciando, difamando y entorpeciendo una desinteresada labor municipal que desde su nombramiento sólo ha buscado lo mejor para Puebla y sus vecinos, pese a quien le pese.

En fin, me parece increíble que dos personajes de esta calaña tengan credibilidad, más aún en Puebla de la Sierra, donde uno de ellos fue literalmente barrido en las últimas elecciones municipales; ¿será éste el motivo de su persecución a la junta municipal electa?

Defienden la existencia de una cañada real en una zona de desarrollo urbanístico, donde, según consta en los archivos municipales, sólo figura una vía pecuaria denominada Cordel de la Mata de la Fuente, que es respetada en una posible actuación municipal; estos dos individuos tuvieron acceso a dichos archivos (uno de ellos, en su día apoyó esa posible actuación municipal, y el otro, posteriormente, reconoció la no existencia de esa cañada real, pero dijo que por qué no se calificaba como tal; ¿con qué sentido?, sólo ellos lo saben), pero como no encontraron nada en su visita a dichos archivos y difamar y denunciar no cuesta nada, y más si se vive del cuento como algunos, pues nada, inventaron miles de argumentos para hacer dudar a algunos vecinos, e intentaron 'encontrar' otra cañada en otra zona de desarrollo de Puebla, la planta transformadora de madera, una obra mancomunada que proporcionará 16 puestos de trabajo en la zona, y que a estos dos 'personajillos' les viene grande.

La última de sus acciones es denunciar los sistemas de empadronamiento de la zona, criticando las labores municipales y argumentando que se empadrona a diestro y siniestro, hablo en el caso de Puebla; ¿qué es lo que quieren estos dos señores?, ¿que muchos vecinos que por motivos laborales no residen de continuo en el municipio renuncien a sus pueblo y, en resumidas cuentas, a sus raíces?

Pues, como diría mi abuela, ¡vais aviaos! Si yo trabajara en el Congreso de los Diputados, viviera en Madrid por motivos laborales y en las elecciones municipales me trasladara a votar a mi Sevilla natal, o fuera uno de los muchos argentino-gallegos de las últimas elecciones gallegas para no volver mucho atrás en el tiempo, ¿estaría temblando ante las actuaciones de estos dos personajes tan peculiares que dicen ser de Puebla?

Unámonos los que realmente nos sentimos vecinos de Puebla, apoyemos la desinteresada labor municipal e intentemos apartar a estos discordantes y antitodo que actúan sin argumentación lógica para con su postura, porque, como he dicho anteriormente, aunque en los papeles se hagan llamar colectivo, realmente sólo son dos 'personajes' a los que les queda grande ser considerados de Puebla.