El comité de Lear arranca a Mas el compromiso de mediar ante la empresa

Los trabajadores de la planta de Lear en Cervera arrancaron ayer al conseller en cap del Gobierno catalán, Artur Mas, el compromiso de exigir a la multinacional que no cierre esta factoría y que negocie un plan para la incorporación de nuevos productos y evitar el despido de los 1.280 empleados. El Ejecutivo catalán pedirá a Lear que la dirección europea de la empresa sea la interlocutora en las negociaciones con los trabajadores.

El papel de mediación lo había asumido hasta ahora un despacho de abogados barcelonés 'que hasta ahora sólo planteaba el cierre irreversible', explicó ayer el secretario general de Comisiones Obreras de Cataluña, Joan Coscubiela. La presidenta del comité de empresa de Lear, Rosa Palau, se mostró satisfecha por el cambio de actitud del Gobierno catalán. 'Pero esto son palabras y queremos ver hechos', añadió Palau.

Artur Mas y el consejero de Trabajo, Lluís Franco, recibieron en el Palau de la Generalitat a representantes de los trabajadores después de la manifestación que éstos llevaron a cabo en el centro de Barcelona. En esta concentración participó el grueso de la plantilla de la fábrica de Cervera, además de representaciones de los trabajadores de otras factorías de la multinacional, alcaldes de municipios de la provincia leridana, el presidente de la Diputación de Lleida, Josep Pont, y miembros de los partidos políticos de la izquierda catalana. La manifestación congregó a unas 1.500 personas en opinión de la Guardia Urbana y unas 6.000 según los organizadores. Las pancartas, lemas y consignas iban dirigidas, además y sobre todo, al Gobierno catalán.

Al lado de consignas como 'no queremos ser una empresa cerrada; no queremos ser la cola del Inem' y 'queremos trabajar, no nos cerrarán', el nombre del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, sonó muchas veces, más incluso que los petardos que los manifestantes tiraron a lo largo de todo el recorrido. El viaje de Pujol a Polonia con empresarios catalanes -Lear tiene la intención de trasladar parte de la producción de Cervera a ese país- indignó a los trabajadores, que no se cansaron de repetir 'Pujol, polaco, Cataluña está aquí', 'Pujol, polaco, Lear está aquí'.

El alcalde de Cervera, Salvador Bordes, confirmó que varias empresas han mostrado ya interés en instalarse en esta localidad en el caso de que Lear cierre la planta.