Española por amor
Nina Jivanevskaia (Moscú, Rusia, 1977) se descubrió española el día en que dejó de pensar en Rusia como el regreso a casa y situó su hogar en España. Había conocido a un español, Francisco Medina, 'la principal razón' de que, desde hace cinco años, viva en España. Se casó con Medina y, tras dos años de estancia en Torremolinos y un complejo papeleo, obtuvo la nacionalidad. Desde entonces nada para el Club Natación Sabadell.
Jivanevskaia es la primera nadadora española poseedora de un récord mundial -el de los 50 metros espalda-, al margen de los nacionales en los 50, los 100 y los 200 espalda y un bronce en los Juegos de Sidney, entre otros metales. 'Cuando una gana una medalla no le importa tanto la reacción que provocará en el país para el que compite como la satisfacción propia', expone Jivanevskaia, que dice no haberse sentido nunca discriminada; 'yo vivo como una española, siempre hablo español y, a diferencia de muchos deportistas de aquí, con residencia en Mónaco o Andorra, vivo en España'.
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