Mejor, pero más caro
El deportivo que cambió la imagen de Hyundai. El primer Coupé salió en 1996 y gracias a su diseño moderno y unos precios ajustados dio a esta marca el prestigio que le faltaba en Europa. Ahora, seis años después, tiene una de las gamas más completas, con utilitarios, berlinas, monovolúmenes y todoterrenos de todos los tamaños.
El Hyundai Coupé ha sido unos de los grandes éxitos de los últimos años. Sólo en España se han vendido 34.200, y no todos por su buen precio: con una línea llamativa y un interior práctico, ha barrido entre los cupés y además se ha convertido en la alternativa a los GTI. El nuevo conserva las ventajas y resuelve muchos defectos: calidad de conducción, frenos, equipo de seguridad... A cambio ha perdido la ventaja del precio: cuesta casi lo mismo que sus rivales.
Línea elegante e interior funcional
Pero el nuevo Coupé tiene buenas cartas, y la primera es la línea, menos atrevida y vanguardista que antes, pero más moderna y elegante. Para empezar es algo más grande: cinco centímetros más largo y tres más alto y ancho. Pero tiene una imagen atractiva y con presencia. El frontal lleva los cuatro faros integrados en dos bloques bien integrados con el capó delantero y el faldón inferior. Y la cintura alta del lateral y la zaga musculosa ayudan a lograr un aspecto sólido y deportivo. El conjunto no abusa de los adornos, pero incluye detalles como las branquias de las aletas delanteras, los dos escapes cromados, el tapón del depósito y sobre todo las grandes llantas de hasta 17 pulgadas, que refuerzan su poderío. El chasis es más rígido y tiene una aerodinámica correcta (CX:0,34).
El diseño exterior beneficia la habitabilidad y aumenta su mercado porque aporta el sentido práctico que les falta a muchos deportivos. No es tan amplio como un familiar de su tamaño, pero tampoco agobia. Ofrece dos buenas plazas delante, con los asientos algo duros y muy envolventes. Y atrás tiene otras dos correctas en anchura y espacio para las piernas, pero justas en altura: sirven para niños o adultos de hasta 1,65 metros. Y como los respaldos son plegables, permiten ampliar un maletero de por sí bastante grande. En cambio, el acceso atrás exige ciertos contorsionismos.
El interior incluye más detalles prácticos: huecos junto al freno de mano, posavasos retráctil frente al copiloto, bolsas en puertas y respaldos, apoyabrazos hueco y dos guanteras, la normal y otra atrás, en el lado derecho. El salpicadero y la consola tienen un diseño moderno, con plásticos sencillos pero correctos. Y aunque la resolución no impacta, la calidad no desentona y da más sensación de solidez que el modelo anterior: a pesar de no llevar marcos en las puertas, apenas hay ruidos aerodinámicos. Además, las suspensiones, deportivas y equilibradas, y los motores, más refinados, han mejorado su comportamiento y aptitudes viajeras.
Tres motores de gasolina
El deportivo coreano se vende con tres motores. El más básico es el 1.6 16v. de 105 CV (15.747 euros), que incluye de serie doble airbag, radio-CD, ordenador de viaje, llantas de aleación y lo habitual. Y se puede completar con el aire (1.081 euros) o el ABS y los airbags laterales, que se ofrecen juntos (1.000 euros). Por encima se sitúa el 2.0 16v. de 138 CV (20.284 euros), que viene con ABS, airbags laterales, control de tracción y climatizador. Y como alto de gama, el 2.5 V6 de 167 CV (23.740 euros), la versión más elaborada: tapicería de cuero, techo solar, seis marchas y llantas de 17 pulgadas. Todos tienen tres años de garantía y se pueden personalizar con muchos accesorios: alerones, volante, acabados en madera o metálicos...
Conclusión
El Hyundai Coupé sigue siendo un deportivo práctico que sirve como coche único para solteros y parejas sin hijos. Tiene una imagen sugerente, un interior amplio y un buen maletero. Y una gama de motores y un equipo de serie completos, incluso en seguridad. Ya no es el cupé más barato, pero ofrece una calidad europea y una buena garantía. Y justifica lo que cuesta.
AL DETALLE
- YA NO ES EL MÁS BARATO El nuevo Hyundai cuesta algo más que los cupés derivados de familiares polivalentes (Xsara, Mégane, Civic...), pero tiene una línea más deportiva y sugerente. También es casi 1.000 euros más barato que otras propuestas algo más elitistas, como el Astra Coupé, y otros 4.000 euros más asequible que un deportivo puro como el Celica. Todos incluyen un equipo de serie similar (cuatro airbags, ABS y aire), pero el motor 2.0 del modelo coreano es menos rápido y potente que la mayoría de sus rivales similares y gasta algo más. A cambio ofrece una imagen atractiva y discreta, y una garantía más completa que los europeos. - MÁS PRÁCTICO Y VISTOSO El salpicadero del Coupé es sencillo, pero bastante aparente. Tiene un enfoque deportivo que se aprecia en el tacto del volante y los tres relojes suplementarios de la consola central, más vistosos que útiles. No destaca por los huecos para objetos, que se concentran junto al freno de mano, pero tanto el tirador como la palanca de cambios presentan un diseño robusto y atractivo que recuerda a Volkswagen. Lo mejor del coche es el interior, más amplio de lo habitual en otros cupés. Y aunque el acceso atrás es incómodo, potencia su sentido práctico con unas plazas traseras válidas para niños o casos de apuro. El conjunto se completa con un maletero grande (418 litros), que se amplía abatiendo por partes el respaldo posterior. En la vista desde atrás destacan la cintura alta y la línea ascendente del capó, además de los dos tubos de escape.
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