Los padres de 500 centros cristianos, contra la venta de condones en escuelas

Entidades de signo cristiano mostraron ayer su rechazo a la campaña anunciada por el Departamento de Sanidad, que prevé abrir un debate en las escuelas sobre la necesidad de instalar máquinas expendedoras de preservativos. La Confederación de Asociaciones de Padres y Madres de Colegios Cristianos de Cataluña, que representa a 500 escuelas, afirmó que en los colegios 'se debe comprar cultura, no preservativos'. Los Médicos Cristianos de Cataluña afirman que la Generalitat no debe 'imponer la moral del preservativo'.

El Departamento de Sanidad aseguró el pasado lunes que no había detectado suspicacias entre las escuelas cristianas, y añadió que muchos de los centros privados que se han sumado a la campaña son religiosos. Sin embargo, la Confederación de Asociaciones de Padres y Madres de Colegios Cristianos de Cataluña expresó ayer su malestar porque, según aseguró la presidenta de la entidad, María Gloria Renom, habían tenido conocimiento de la campaña 'a través de los medios de comunicación'. Renom aseguró que a ninguna de las 500 escuelas en las que la entidad está representada se le había propuesto sumarse al debate que Sanidad pretende abrir en torno al sida y a las medidas para prevenirlo.

La presidenta de las Asociaciones de Padres y Madres de Colegios Cristianos aseguró, sin embargo, que de haber recibido la propuesta de la Generalitat, probablemente ninguna de las 500 escuelas la habría aceptado. 'Nuestras escuelas tienen un ideario propio y realizan sus propias campañas de prevención en temas de salud, aunque encaminadas a formar a los alumnos en la responsabilidad y los valores', afirmó. Renom añadió que es 'impensable' que en estas escuelas se adopten medidas como la instalación de máquinas dispensadoras de condones. 'En las escuelas e institutos, los alumnos tienen que comprar valores y cultura, no preservativos', sentenció.

En términos parecidos se pronunció ayer el presidente de Médicos Cristianos de Cataluña, Josep Maria Simon, quien señaló que la Generalitat 'no debe imponer la moral del preservativo' y agregó que, a pesar del uso de este profiláctico, 'los casos de sida siguen aumentando'.

El arzobispado de Barcelona se negó ayer a pronunciarse sobre la cuestión. Fuentes de esta institución indicaron que los obispos de las ocho diócesis catalanas analizarán la campaña de la Generalitat el próximo 11 de febrero, en la reunión de la Conferencia Episcopal Tarraconense. Este encuentro ya estaba convocado cuando se anunció la campaña, pero los obispos añadirán la cuestión en el orden del día porque se trata de un 'asunto social importante'.

A diferencia de los padres de las escuelas cristianas, la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos de Cataluña (FAPAC), expresó ayer su absoluto apoyo a la campaña de la Generalitat y en concreto a la posibilidad de que los centros docentes dispongan de máquinas de preservativos. 'Todo lo que sea dar seguridad a nuestros hijos es bienvenido', dijo Joan Jordi Rosell, secretario de la FAPAC. Rosell lamentó, sin embargo, que la Generalitat no haya dado a las asociaciones de padres la posibilidad de participar en la elaboración de la campaña. En ella participarán 61.500 alumnos de 639 institutos de secundaria, que se pronunciarán en un referéndum sobre la necesidad de instalar en los institutos máquinas de preservativos.