La UE concede 22 millones a Pamplona y Pasaia para regenerar barrios en crisis

Pamplona y el eje San Sebastián-Pasaia recibirán 11,4 y 10,5 millones de euros, respectivamente, del programa europeo Urban para financiar proyectos de regeneración de zonas degradadas. Las ayudas comunitarias, aprobadas ayer por la Comisión Europea, suponen el 50% de las inversiones previstas en estas ciudades. El resto será aportado por las administraciones locales y deberá ejecutarse antes de 2006.

El Ayuntamiento de Pamplona destinará los fondos del plan Urban a la recuperación urbana de parte del centro histórico de la ciudad y del barrio de la Rochapea, separado por el Arga. Por su parte, San Sebastián y Pasaia lo invertirán en la revitalización integral (urbana, social y económica) de una de las zonas más castigadas por el paro del País Vasco.

El comisario responsable de Política Regional, Michel Barnier, destacó que estas subvenciones pretenden potenciar la rehabilitación económica y social de barrios en crisis y promover un desarrollo urbano sostenible. San Sebastián-Pasaia y Pamplona figuran entre las 10 ciudades españolas elegidas por la UE, que ayudará con 728,3 millones de euros a un total de 70 zonas urbanas.

La UE asigna a Pasaialdea una cantidad ligeramente inferior a los 12 millones de euros solicitados a finales de 2000. Según el comisario Barniar, los fondos del Urban financiarán proyectos destinados a propiciar la 'inclusión social, la formación y la renovación de la infraestructura empresarla'. De los 10,5 millones concedidos, siete se destinarán a regenerar zonas abandonadas respetando el medio ambiente, 1,3 millones para proyectos de apoyo al empleo, un millón para la educación y formación de grupos socialmente excluidos y 600.000 euros para la mejora de acceso y fomento del uso de las nuevas tecnologías. Otros 600.000 euros costearán la asistencia técnica.

Esta inyección económica beneficiará a una población de 45.725 habitantes repartidos en los barrios donostiarras de Bidebieta, Larratxo-Altza y Herrera y en los tres distritos de Pasaia (Trintxerpe, San Pedro y Antxo). El entorno de la bahía de Pasajes es un área en la que se concentran graves problemas de índole social, económica, urbana y medioambiental, con unos índices de paro y de contaminación elevados.

Los cinco ayuntamientos beneficiados (San Sebastián, Pasaia, Lezo, Rentería y Oiartzun) pretenden reflotar la zona portuaria de La Herrera para atraer a la actividad industrial. También prevén la creación de parques y nuevos espacios verdes y la mejora de las conexiones ferroviarias y por carretera.

Pasaialdea presentó en 1994 su candidatura al plan Urban, aunque la concesión de los fondos fueron rechazados en las dos últimas convocatorias. Hasta ahora, el único municipio vasco que ha accedido al plan Urban es Barakaldo, cuyo proyecto fue aprobado por la UE en 1995, con un montante cercano a los 1.500 millones de pesetas.

Integrar la Rochapea

Pamplona acometerá una renovación urbana en su centro histórico y en el vecino barrio de Rochapea, separado por el Arga. La ayuda comunitaria permitirá construir un gran parque fluvial junto al río, en el que quedará integrado el futuro Museo de San Fermín, así como el cerramiento del borde norte de la ciudad medieval, con la rehabilitación del Paseo de Ronda, la construcción de un centro cívico en el Palacio del Condestable, edificio medieval declarado Bien de Interés Comunitario, y diversos planes de pavimentación, mejora y urbanización del área.

Asimismo, se pondrán en marcha programas de desarrollo comercial, hostelero y artesanal y fomento de la financiación empresarial y se creará un centro de nuevas tecnologías, además de una mediateca. El Ayuntamiento pamplonés tiene un plan específico de apoyo a colectivos desfavorecidos, como los inmigrantes o la tercera edad. Además de incentivar la salida al mercado del alquiler de las viviendas vacías del área, habilitará un servicio piloto de acogida y asesoramiento para inmigrantes, un programa de apoyo a familias cuidadoras de personas mayores y una iniciativa de atención domiciliaria de afectados por enfermedades mentales.

Según fuentes municipales, durante 2001, más de 250 vecinos de 50 ONG han participado en los distintos foros de seguimiento de las directrices del Urban, aspecto clave para ajustar el proyecto a las necesidades reales más básicas de un entorno que lucha contra el despoblamiento y la marginalidad.

El Ministerio de Hacienda entregará ahora el 7% de la ayuda total como anticipo; el resto se hará efectivo a medida que los municipios justifiquen la realización de los proyectos.