Nigel Hawthorne, actor

El actor Nigel Hawthorne, protagonista de la película La locura del rey Jorge y la serie de televisión Sí, ministro, murió ayer a la edad de 72 años, informó Ken McReddie, que fue su agente durante 30 años.

Hawthorne, que había sido nombrado caballero del Imperio británico en 1999, murió de un ataque al corazón en su domicilio. El actor acababa de ser dado de alta en el hospital donde se había sometido a un tratamiento de quimioterapia para tratar de combatir el cáncer que se le había detectado hace 18 meses. El tratamiento contra el cáncer había dado buenos resultados y el infarto se produjo de manera inesperada.

Hawthorne saltó a la fama como el intrigante Sir Humphrey en la serie de televisión británica Sí, ministro, pero fue su interpretación del soberano Jorge III de Inglaterra en la película La locura del rey Jorge la que le valió ser nominado para el Oscar al mejor actor y el reconocimiento internacional.

Nacido en Coventry (centro de Inglaterra) en 1929, cuando apenas contaba dos años su familia emigró a Suráfrica, donde él se crió. Comenzó estudios universitarios de periodismo en Ciudad del Cabo, pero los abandonó al cabo de un año para comenzar su carrera de actor. A comienzos de los sesenta regresó al Reino Unido. Su comportamiento modesto le apartó de los grandes papeles hasta que su interpretación de un indeciso en la obra El filántropo, de Christopher Hampton, le reveló que debía mostrarse más seguro de sí mismo.

A partir de entonces, su carrera comenzó a florecer hasta alcanzar el estrellato en Sí, ministro y su continuación, Sí, primer ministro durante los años ochenta. Su carrera en el cine también despegó y en 1991 obtuvo un premio Tony por su interpretación en Shadowlands, además de ser nominado para los Oscar en 1995 por La locura del rey Jorge.

Fue durante la campaña de los Oscar de ese año cuando la prensa estadounidense reveló su homosexualidad. El actor, quien desde 1979 vivía en una mansión del siglo XV en la campiña inglesa con su compañero Trevor Bentham, siempre se mostró contrario a la homosexualidad militante y afirmaba que 'hacer gala de la sexualidad de uno ofende a las personas y ¿qué sentido tiene hacer eso si estás intentando ganártelas?'.-