Sierra Nevada abre la temporada de esquí con sólo 4,5 kilómetros de pistas

Sierra Nevada, la estación de esquí situada más al sur de Europa, inauguró ayer la nueva temporada. La apertura, sin embargo, no se hizo en las mejores condiciones posibles ya que sólo hay 4,5 kilómetros de pistas esquiables del total de 66 con que cuenta la estación. Cetursa, la empresa propietaria, estima que para el próximo puente habrá ya alrededor de 12 kilómetros para deslizarse. Mientras llega ese aumento, hay un límite máximo de 3.800 esquiadores al día.

Sierra Nevada se pone en marcha este año con nuevas infraestructuras, derivadas de una inyección extraordinaria de 3.000 millones de pesetas por parte de la Junta de Andalucía, propietaria mayoritaria de la empresa pública Cetursa. Entre las novedades con las que se encontrarán los esquiadores están la sustitución de algunos remontes que se consideraban obsoletos por otros nuevos y de mayor capacidad, un nuevo edificio de servicios en la zona de Borreguiles, un nuevo sistema de forfaits o pase de acceso a los remontes y un mayor número de cañones productores de nieve artificial, capaces de producir ahora hasta 26 kilómetros lineales de nieve.

Tras el éxito de la temporada pasada en cuanto al número de personas, que alcanzó la cifra de 937.000 esquiadores y 370.000 visitantes que pasaron por la estación únicamente para visitarla o pasar el día pero sin ponerse unos esquís, Miguel Ángel Serrano, director general de Cetursa, considera que los retos más cercanos pasan por incrementar el número de visitas los días laborables, ofrecer una mayor calidad de servicio y conseguir que Sierra Nevada esté activa más allá de los aproximadamente cinco meses de temporada invernal. Serrano, que considera el verano como 'la asignatura pendiente', cree que hay que apostar por otros deportes como la bicicleta de montaña o el parapente para conseguir que Sierra Nevada esté abierta 12 meses al año. Un incentivo para los visitantes, asegura Serrano, son los 20 grados de media que se registran en los meses veraniegos en la sierra, además de los valores ecológicos de todo el área que circunda la estación, el Parque Nacional de Sierra Nevada.

La importancia económica de la estación invernal no es nada desdeñable para la provincia de Granada. Mientras que la propia Cetursa facturó durante la temporada 2000-2001 alrededor de 3.500 millones de pesetas, el efecto económico estimado en todos los servicios que surgen alrededor del esquí (hoteles, restaurantes, desplazamientos,...) ronda los 40.000 millones.

Empleos

En lo referente al empleo, estos mismos servicios generan 3.000 empleos directos y 1.785 indirectos, de los que Cetursa genera entre 300 y 600 según las necesidades de la temporada. Además, según el área de estudios económicos de la Caja General de Granada, el peso de la actividad que gira alrededor de la nieve es el 27,7% en el total de la economía turística de la provincia de Granada. Estos datos tienen mayor sentido si se recuerda que, por ejemplo, el día de máxima afluencia el año pasado se rondó los 20.000 visitantes; que un buen fin de semana llegan a Sierra Nevada, alrededor de 12.000 personas y que en la estación y alrededores más cercanos se pueden encontrar 5.000 plazas hoteleras, que alcanzan las 25.000 si se cuentan los hoteles de la capital, a 32 kilómetros.

Casi la mitad de los visitantes a la estación son andaluces. Entre ellos, son los propios granadinos, seguidos por los malagueños quienes visitan Sierra Nevada en mayor cantidad. Tras Granada y Málaga, Sevilla y Cádiz completan las provincias con mayor afición por el esquí. De fuera de la comunidad andaluza, Madrid es quien más visitantes aporta. Los portugueses, quizá por su cercanía, son los extranjeros más fieles a la nieve granadina.

Los 66 kilómetros de pistas hacen de esta estación la segunda de mayor longitud en España, aunque es muy difícil conseguir abrir la estación en su totalidad.