Los alumnos de Guardamar protestan por la falta de espacio y de calefacción

Los 600 alumnos del único instituto de educación secundaria de Guardamar del Segura (El Baix Vinalopó) salieron ayer a la calle a protestar frente al Ayuntamiento de los problemas que padecen. Los estudiantes se quejaron de la falta de espacio en el centro, y de las dificultades que tienen alumnos y profesores para cruzar una carretera nacional que divide el instituto en dos. La LOGSE convirtió a la escuela Molívent en un centro de secundaria, y la falta de aulas obligó a compartir instalaciones con el viejo instituto.

La situación se ha agravado en las últimas semanas, ya que con el frío y el aumento del consumo eléctrico la calefacción 'apenas funcionaba diez minutos seguidos, los plomos saltaban', explicó una docente. Los alumnos, bajo el lema: La ampliación es la solución partieron del centro hasta concentrarse en el Ayuntamiento, donde dedicaron a las autoridades una sonora pitada. En la marcha no hubo consignas contra la aplicación del Programa de Incorporación Progresiva del Valenciano (PIP), que ha provocado duras críticas por parte de la Asociación Dama de Guardamar. En este sentido la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) de este centro hizo público un comunicado en el que se manifiesta 'a favor de la política educativa iniciada por el nuevo equipo directivo'.

Los padres, en el escrito aprobado por unanimidad por parte de la Junta directiva del AMPA reconocen que 'el valenciano es una seña de identidad muy importante en Guardamar del Segura, que lo singulariza entre el resto de pueblos de la comarca'. La Asociación recuerda que el PIP se aplica en este centro desde el curso 1996-97 y que ha sido respaldado en varias asambleas por los padres. El colectivo solicita a las autoridades educativas que 'clarifiquen públicamente la polémica ocasionada por la Asociación Dama de Guardamar', y denuncian que el alcalde, Francisco García, del PP, acompañó a miembros de esta asociación de castellanohablantes a entregar firmas ante la sede de la Consejería en Alicante contrarias a este programa de educación bilingüe.

El comunicado del AMPA concluye: 'Es necesario mantener y respetar la cultura tradicional de Guardamar, porque así respetamos a nuestros antepasados. Y también es necesario enseñar a quienes deciden vivir entre nosotros'.