El conductor de un camión muere aplastado en Velilla de San Antonio por una viga que tiró con el remolque

La lista de víctimas mortales por accidente laboral en la región aumentó ayer con un nuevo siniestro mortal. El conductor de un camión, Fernando Gómez, de 43 años, murió aplastado por una viga de 8.700 kilos de peso, después de que el remolque basculante del vehículo la derribara. La víctima llevaba trabajando desde principios de mes en la construcción de una gran nave industrial en el polígono IV de Velilla de San Antonio, según comentó un encargado de la obra.

El accidente se produjo sobre las 11.30 de la mañana en la calle de los Metalistas de dicho municipio. Según explicó un portavoz de la Guardia Civil, Gómez se encontraba repartiendo piedra de pedernal que sirve de base para el suelo de la nave industrial. En un momento dado, el conductor hizo avanzar el camión, un Pegaso con matrícula M 9929 MX, sin darse cuenta de que llevaba basculado el remolque. Éste chocó contra una viga que se hallaba colocada sobre dos pestañas, sin llegar a estar soldada. A pesar de la poca velocidad a la que circulaba el trailer, derribó la viga, de 15 metros de largo y 8.700 kilos de peso.

La viga cayó entre el remolque y la cabina y aplastó esta última, lo que causó la muerte casi instantánea a su conductor. Los compañeros de Gómez avisaron al teléfono de emergencias 112. Hasta el lugar se desplazaron dos dotaciones de los bomberos de la Comunidad de Madrid que intentaron rescatar a la víctima. A su llegada, el hombre se encontraba ya en parada cardiorrespiratoria.

Los bomberos utilizaron la propia grúa de las obras de la nave para levantar la viga y poder extraer el cuerpo sin vida del conductor. También tuvieron que cortar el techo de la cabina. El Servicio de Emergencias y Rescate de la Comunidad de Madrid (Sercam) envió al lugar un helicóptero sanitario. El médico sólo pudo certificar la muerte, antes de la llegada de la comisión judicial.

El conductor fallecido había nacido en Madrid, estaba casado y tenía tres hijos. Trabajaba para una subcontrata que había comenzado a prestar sus servicios a principios de mes, según explicó un encargado de la obra.

Falta de seguridad

El técnico en salud laboral de la Construcción de UGT, Domingo Martínez, anunció ayer tarde que el sindicato piensa denunciar ante la Inspección de Trabajo la falta de medidas de seguridad que presentaba la obra, ya que, en su opinión, se debería haber acometido la construcción del suelo antes de levantar la estructura de la nave. 'Este accidente nos da una vez más la razón de los excesivos ritmos de trabajo que se están imponiendo en la construcción y la falta de coordinación entre los distintos trabajos', afirmó el responsable de UGT. Desde principios de año han muerto en la construcción 36 obreros, incluido el de ayer, frente a las 30 víctimas mortales de 2000.

Por otra parte, un trabajador se seccionó cuatro dedos de la mano derecha (todos excepto el pulgar) a la altura de la segunda y tercer falange mientras trabajaba en la empresa ALU Europa, en Valdemoro, según informó el Insalud-061. Una UVI móvil de este servicio de emergencias lo atendió en el lugar de accidente y lo trasladó posteriormente a las urgencias del hospital Doce de Octubre, en la capital.